Artículos

Violeta Lópiz

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Fue una tarde lluviosa en Berlín, acudí a visitar los archivos de la Bauhaus, esa Escuela de Arte que asombró al mundo en el periodo entreguerras. Había poca gente y me fijé en una muchacha frágil de mirada profunda y soñadora. Arreciaba al salir y nos guarecimos a la espera de un taxi que abordamos juntos. Pronunció ese bello nombre que quiere revelar su oficio pues Violeta Lópiz es una reputada ilustradora; mi amiga Susana Aparicio, arquitecta que ejerce en Amsterdam, adora sus imágenes para cuentos infantiles. Al saber que yo vivía en Cádiz describió un delicioso dibujo que identifica uno de los lugares con mayor encanto de nuestro centro histórico. El pasado martes nos encontramos nuevamente, ya en la confortable librería cafetería La Clandestina que ofrece refinados productos para deleite de mente y paladar en el corazón de Cádiz y se reconoce mediante unos trazos de Violeta.

En tan acogedor espacio hablamos de sus dibujos para el libro de Antonio Rubio, 'Siete Llaves de Cuento' que muestra la estructura de las historias populares españolas de tradición oral. Violeta ha reproducido las ocho ilustraciones que componen el libro mediante serigrafías. Las imágenes preceden cada capítulo del libro, mediante un juego metafórico a base de aves con pico en forma de llave. En el que se dedica a pareados pinta dos patos unidos mediante llave inglesa, para los estribillos un pájaro carpintero de llave antigua pica una flauta, las enumeraciones son pingüinos con llaves de hotel, los romancillos un pequeño flamenco rosa con llave propia de los años setenta, las historias de sumas y restas se describen mediante un pavo real con llave de coche, pollitos y llaves de cuerda para juguetes son cuentos encadenados, los diálogos pájaros bobos con llaves de baúl, y para los cuentos de nunca acabar nada mejor que un huevo con cerradura. Violeta maneja con pericia el trabajo artesano de la serigrafía para reproducir cortas tiradas de sus ilustraciones y mediante colores muy sugestivos consigue resultados muy agradables. Creo que el paso por Cádiz de la ingeniosa artista va a ser muy fugaz, entre aromas de café y papel impreso deja una muestra de su excelente obra que considero imprescindible visitar