El Beato Diego espera a Europa

No es necesario forzar mucho la memoria para elaborar una lista de proyectos anunciados que aguardan a que llegue la financiación anhelada para salir del cajón y convertirse en una realidad. Sin hacer mucho esfuerzo, son varios los nombres que se vienen a la mente, más aún, si se tiene el Casco Histórico de la ciudad como marco. Valcárcel, Olivillo y la Escuela de Náutica son los más conocidos y denunciados pero existen otros, como el de la rehabilitación del colegio Beato Diego que se encuentran en un paréntesis. Hace un año que el Consorcio de la Zona Franca salió al rescate de uno de los proyectos enquistados de la Universidad de Cádiz: la recuperación del Colegio Mayor. Ya por entonces, el delegado Jorge Ramos matizó que la ejecución del proyecto se escribiría sobre las líneas de financiación de la Unión Europea. Unas líneas que a fecha de hoy aún no se han concretado y en las que se siguen trabajando para encontrar los 9,5 millones necesarios para poner en marcha el proyecto, según explicaron fuentes del Consorcio.

Desde la Universidad de Cádiz señalaron que en estos últimos meses se han celebrado varias reuniones entre las dos entidades al objeto de saber cómo iba esa búsqueda de financiación sin que se haya producido ninguna novedad que pueda reactivar el proyecto y que ha provocado otro año en blanco, otro más, para la rehabilitación del edificio.

Al igual que ha sucedido con otros muchos edificios de la ciudad, no es la primera vez que un plan conveniado, firmado y publicitado se pierde en la memoria de sus promotores. En 2011, la Consejería de Obras Públicas de la Junta de Andalucía anunciaba la apertura del centro después de una década vacío. Tanto la por entonces responsable del área, Josefina Cruz, como el que fuera rector, Diego Sales, mostraban sus esperanzas de que los trabajos comenzasen antes de que acabara el año y situaban la apertura para los nuevos estudiantes en el curso 2013/2014. La Administración llegó a pedir la licencia de obra. Durante algunos meses se iniciaron algunos trabajos como los estudios geotécnicos y arqueológicos del terreno, pero poco más se avanzó. Poco se sabe del paso atrás que dio por entonces la Junta de Andalucía y que propició que dos años después la UCA buscara el apoyo económico a través del Consorcio de Zona Franca. Lo cierto es que, al igual que ha ocurrido con otros proyectos de la ciudad, el edificio sigue esperando a que llegue ese impulso definitivo, en forma de nuevo convenio o no, para su rehabilitación puesto que la universidad gaditana sigue necesitando disponer del Colegio Mayor.