Irene García y el diputado por Cádiz González Cabaña, durante su comparecencia ayer ante los medios. :: LA VOZ
CÁDIZ

Los socialistas reclaman en el Congreso un plan industrial y económico para Navantia

El PSOE trata de que el Gobierno considere a los astilleros como «una cuestión de Estado y no un asunto electoral»

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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La carga de trabajo en los astilleros públicos debe ser una cuestión de Estado. Este es el mensaje que han lanzado los diputados socialistas de Cádiz, Murcia y Galicia en relación al futuro de Navantia. Consideran que la actividad en las plantas se mueve en función de los periodos electorales. El diputado por Cádiz Francisco González Cabaña presentó ayer junto a la secretaria provincial el partido, Irene García, la propuesta parlamentaria que ha elaborado el PSOE para su próximo debate en el Congreso y que trata de asegurar la viabilidad de los astilleros. La iniciativa pasa, sobre todo, por reclamar al Gobierno de la Nación la aprobación de un plan industrial, laboral y económico específico para Navantia, que garantice la actividad de forma continuada en el tiempo y sin fisuras. Cabaña y García destacaron que esta iniciativa obedece a los contactos mantenidos en los últimos meses con los representantes sindicales del sector del Metal. Los portavoces de la industria naval coinciden en señalar que el sector no puede vivir de los contratos que se anuncian cada víspera electoral. Según Irene García, la situación de Navantia es agónica y «no se pueden permitir más engaños». Ante esta situación, los socialistas gaditanos exigen al Ejecutivo de Rajoy y, especialmente al ministro Montoro, que incluya una partida económica específica para Navantia en los Presupuestos Generales del Estado de 2015.

El diputado González Cabaña fue más allá en sus comentarios al advertir que el contrato del quinto gasero que se negocia desde primeros de año con Gas Natural sigue en el aire. El próximo mes de noviembre se cumple, precisamente, un año de la adjudicación de los cuatro primeros gaseros de Gas Natural a dos astilleros asiáticos. Cabaña ha reprochado al Gobierno de la Nación la pérdida de este contrato y pide más concreción sobre el quinto buque. Según Cabaña, la carga de trabajo anunciada para Navantia es como el poema de Becquer sobre las oscuras golondrinas, «se trata de unos contratos que se firmarán antes de las elecciones, pero que luego no volverán más».

En este sentido adelantó que el anuncio de la construcción de dos Buques de Acción Marítima (BAM) sigue aún en tramitación. Es decir, la segunda fase de los BAM ha pasado el primer filtro, que es la confirmación del proyecto por parte del Consejo de Ministro, pero aún resta aprobar la financiación de los buques y la firma del contrato. Esta situación de incertidumbre es la que quieren atajar los socialistas con su iniciativa parlamentaria. De lo que se trata es de dotar a Navantia de inversiones con cargo a Defensa. Tanto Irene García como González Cabaña señalaron que el único contrato que ha firmado Navantia hasta la fecha es con Iberdrola para la construcción de las estructuras metálicas del parque eólico-marino que la compañía eléctrica desarrolla en Alemania.

Cabaña acusó al presidente de la SEPI, Ramón Aguirre, de ser el mejor embajador electoralista del PP. El responsable de la gestión de las empresas públicas españolas compareció en febrero en el Congreso para reconocer que Navantia estaba casi en quiebra y tres meses después, sin embargo, «ha visitado Ferrol y Cádiz para explicar justo lo contrario y anunciar la adjudicación de unos contratos que aún no están ni siquiera firmados». Los socialistas insisten en que el futuro de los astilleros es también el futuro social y laboral de la Bahía de Cádiz.