El Consistorio embellecerá la finca de Cruz Roja al ser el primer edificio de Real

Ya está todo prácticamente cerrado y solo ciertos problemas de comunicación con la propietaria del antiguo edificio de la Cruz Roja, están retrasando el proceso para que el inmueble forme parte del catálogo de fincas municipal. El justiprecio que se va a pagar por la expropiación forzosa del inmueble ya está fijado y los trámites administrativos se encuentran en la última fase, de manera que se prevé que en verano se pueda actuar (al menos que surja algún problema) sobre una propiedad que está en riesgo de derrumbe.

Es el motivo por el que el Ayuntamiento decidió acometer la expropiación, con el objetivo de realizar de inmediato obras de consolidación que eviten la caída de cascotes. Actualmente todo su perímetro se encuentra delimitado con vallas debido precisamente al peligro de que desplomen sus paredes, ante el mal estado de conservación que evidencia. Techos que se han venido abajo, escombros por gran parte de su suelo y una concentración de animales, principalmente de gatos.

Es la imagen que ofrece uno de los primeros edificios que se pueden ver si se accede a la ciudad a través de la calle Real en la zona de Montañeses. Una visión que impacta tras la transformación sufrida por la vía y que se pretende cambiar. Por ello, una vez asegurado el inmueble, se procederá a embellecer la finca para que pueda integrarse con el entorno.

El Ayuntamiento cuenta con un anteproyecto para una actuación que no será sencilla si se tiene en cuenta que se trata de una construcción protegida con un nivel alto, en concreto el dos, dentro del Plan Especial de Protección y reforma interior del Casco Histórico (Peprich). Es decir que hay elementos que no se pueden modificar y gran parte de la estructura se debe respetar a la hora de realizar cualquier obra o trabajo para su mejora.

Pero el Consistorio está decidido a sacar adelante esta rehabilitación parcial y no solo cuenta con presupuesto para la adquisición de la finca, sino también para acometer estas primeras labores de urgencia para que se mantenga en pie y además para dotarlo de una imagen aceptable, lejos de su actual estado de abandono.

Por otro lado están los planes para darle un uso. Al parecer actualmente existe sobre la mesa de Desarrollo de la Ciudad tres alternativas para la dotación de este inmueble. Una de ellas ya se ha dado a conocer. Y es que el antiguo edificio de la Cruz Roja se encontraba entre los posible espacios para alberga el Museo de Camarón. Sin embargo, se trata de una posibilidad casi descartada debido precisamente a su nivel de protección y a que no cumpliría los requisitos que se están buscando para albergar el legado del cantaor.

De todas maneras se cuenta con otros usos, si bien no han trascendido por el momento. Eso sí, la puesta en valor de manera íntegra de la finca sería de millones de euros debido a su mal estado y la imposibilidad de hacer grandes cambios estructurales. La última vez que se intentó sacar del olvido al antiguo edificio de la Cruz Roja fue para crear un hotel. Incluso había inversores para que el proyecto fuera viable, pero precisaban de la parcela colindante al edificio, un aparcamiento de titularidad militar, cuyas negociaciones no pudieron avanzar en favor de los intereses del Ayuntamiento, perdiéndose esta oportunidad.