provincia de CÁDIZ

Pendientes del 'fracking'

Industria ha autorizado sondeos en más de 80.000 hectáreas

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A la espera. Así se encuentran los colectivos ecologistas de la provincia después de que el Ministerio de Industria haya concedido los permisos necesarios para hacer sondeos con el objetivo de realizar extracciones de gas a través de la técnica conocida como ‘fracking’ en unas 80.000 hectáreas de la provincia de Cádiz. A la espera, porque desde que se otorgaran las autorizaciones pertinentes parece que no ha habido ningún movimiento. «Es difícil saberlo», asegura Pablo Álvarez de la Plataforma Cádiz Libre de ‘fracking’, puesto que «estamos hablando de una gran extensión de terreno». En concreto se han concedido los permisos para hacer estudios en dos parcelas situadas en El Tesorillo y Ruedalabola, en un terreno que supera el 10% de toda la provincia gaditana y que afecta a los términos municipales de La Janda y del Campo de Gibraltar. «Lo más grave de todo esto es que se ha incluido suelos de hasta tres parques naturales», añade Álvarez refiriéndose a Los Alcornocales, La Breña y el Estrecho.

La extensión podría ser mayor puesto que está tramitando conceder permisos para unas 20.000 hectáreas más en la zona de la Campiña de Jerez y la Costa Noroeste de la provincia.

Por eso organizan jornadas como las del sábado pasado en Barbate aprovechando la convocatoria de lucha contra el ‘fracking’ realizada en 25 países. «Queríamos informar a las personas que viven en estos pueblos y que están aquí día a día para que nos avisen en el caso de que vean algún movimiento extraño». Hasta una veintena de ciudades españolas realizaron diversos actos para mostrar los peligros que entraña extraer gases no convencionales «a pesar de los empeños de la industria por minimizarlos», según informaron Ecologistas en Acción.

Para Álvarez, la conciencia social es un pilar importante sobre todo de cara a las instituciones públicas. En Cádiz ya son siete los municipios que se han declarado como zonas libres de ‘fracking’ como Medina, Conil, Barbate, Castellar, Olvera, Puerto Real y Rota. La plataforma no ha conseguido el apoyo de la Diputación Provincial, que votó en contra de adherirse a esta iniciativa. En cuanto a la Junta, la plataforma le reclama que agilice los trámites para prohibir esta práctica.

Desde ayuntamientos como el de Medina, expusieron la falta de conocimiento por parte de las entidades locales: «No nos han pedido información sobre las autorizaciones» por lo que se ven atados de pies y manos.

Desde Ecologistas en Acción advierten de que «la masiva movilización social de los países donde se pretende aplicar la técnica deja claro que las empresas no tendrán la licencia social para operar».

Alto riesgo de contaminación

El ‘fracking’ es una técnica a través de la cual se consigue gas fracturando la roca con presión hidráulica. El objetivo es poder extraer el gas atrapado en la propia roca aunque para llegar hasta él hay que hacer perforaciones a varios cientos de metros de profundidad, primero en vertical y después en horizontal. Para ello se emplea una inyección de agua con arena y elementos químicos lo que, según explica Álvarez, «genera grandes perjuicios como la contaminación de los acuíferos con el consiguiente problema para la agricultura, la ganadería y todos los sectores que dependan de la zona», incluso para «el propio ser humano». Además de la «transformación del paisaje, el alto riesgo de vertidos tóxicos o el aumento de riesgo de que se produzcan terremotos como ya se ha sucedido en ciudades de Estados Unidos».