Sociedad

Series y alcohol, el cóctel perfecto

La escritora Mariló García recopila en un libro las mejores combinaciones del firmamento catódico

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Las series de televisión viven una etapa gloriosa. Veneradas por el público, se han convertido en el refugio de cineastas y estrellas de Hollywood gracias el derroche de creatividad de sus guionistas. Personajes como Don Draper, Josiah Bartlet, Tony Soprano, Eddard Stark, Emily Thorne, Carrie Mathison o Sookie Stackhouse tienen hoy tanta fuerza como la que detentaron en el pasado Vito Corleone, Jake La Motta o Harry Callahan. Sus ropas, gestos y desvelos ejercen una poderosa influencia sobre los espectadores, que copian sus movimientos sin darse cuenta. Hay universidades que recurren a 'Mad Men' en sus seminarios sobre publicidad, articulistas que establecen sesudos paralelismos entre la campaña que enfrentó a Obama y Romney en 2012 y la ficticia que libraron años antes Matt Santos y Arnold Vinick en 'El Ala Oeste de la Casa Blanca' y modistas que se inspiran en la Carrie Bradshaw de 'Sexo en Nueva York'. Pero si algo tienen en común estos personajes es que todos ellos empinan de vez en cuando el codo, y algunos hasta de forma asidua. Ese es el hilo del que tira Mariló García en su libro 'Cócteles fuera de serie' (Lunwerg Editores), donde hermana 80 producciones con otras tantas combinaciones de licores para que los lectores puedan brindar a la salud de sus ídolos. Estas son algunas de las recetas más sabrosas de esa particular barra catódica.

'Mad Men'

Old Fashioned

Una de las grandes debilidades del sibarita Don Draper es esta bebida que mezcla whisky, angostura y soda, aderezado todo ello con una rodaja de naranja, azúcar, una guinda y el imprescindible hielo. Un sabroso trago que despierta la creatividad del socio de la agencia Sterling, Cooper, Draper & Pryce, quien no duda en preparárselo a otro hombre hecho a sí mismo como el fundador de la cadena de hoteles Hilton ni tampoco en darle lecciones a su hija sobre el delicado arte de su preparación.

'Sexo en Nueva York'

Cosmopolitan

El rosa es el color de Carrie Bradshaw, cuanto menos en lo que toca a bebidas. Sus altibajos a cuenta de los hombres quedan regados con este cóctel a base de vodka, zumo de limón y de arándanos y un chorrito de triple seco, sin que falte la rodaja de naranja y una cucharadita de azúcar. Y si no hay uno a mano, bien vale un Martini seco como el que la deja haciendo eses a la salida de la redacción de 'Vogue'.

'Friends'

Amigo

Lo suyo era el café. En torno a las tazas del Central Perk se desataban las conversaciones más surrealistas entre Monica, Chandler, Rachel, Ross, Phoebe y Joey. Pero todos y cada uno de ellos sabían desmelenarse con unos buenos chupitos o un Martini. Claro que si una bebida se les amoldaba como anillo al dedo era esta elaborada a base de tequila, licor de café y leche o crema. El trago perfecto para brindar por un compadreo a prueba de equívocos, corazones destrozados y gatos apestosos.

'Los Soprano'

Godfather

Puede que el cóctel Bacardi gozase de gran predicamento entre los mafiosos que hicieron de la Cuba de Batista su campo de juegos particular o que el Southside sirva para evocar las andanzas de Al Capone o Sam Giancana, pero cuando de Tony Soprano se trata, lo mejor es verter whisky y Amaretto (licor de almendras) en un vaso bajo con abundante hielo. Solo así se rendirá justicia al desaparecido James Gandolfini, el único capaz de hacerle algo de sombra a los Corleone.

'Boardwalk Empire'

Pimm's Cup

La Ley Seca fue el mejor regalo que le hizo nunca el Gobierno estadounidense a la Mafia. Fortunas labradas a partir del contrabando de alcohol y ríos de sangre vertidos para conquistar mercado fueron el resultado de una medida con la que los jerarcas de los bajos fondos se sentían la mar de cómodos. Pocos la celebraron tanto como Nucky Thompson, padrino de Atlantic City al que nada le falta. Claro que nadie es perfecto, como pone de manifiesto un senador cuya demanda de este cóctel elaborado con ginebra, zumo de naranja y ginger ale es incapaz de satisfacer el hampón.

'House'

Whisky sour

Insomne, cínico, siempre con una pulla preparada. Así es este doctor situado en las antípodas del arquetípico médico tan del gusto de los espectadores. Y sin embargo quedaron subyugados por su inexplicable encanto. House es un crack, y como les ocurre a los fuera de serie, las convenciones no van con él. Por eso no duda en darse el gusto de una buena noche de copas sin miedo a los efectos del alcohol sobre su mente. Ginebra, ron... A nada le hace ascos el galeno. Aunque lo suyo es este combinado a base de whisky y Sour Mix aderezado con una guinda.