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Reconocimiento a la constancia

El Consistorio homenajea a los presidentes de las asociaciones de vecinos, quienes aseguran que no bajarán la guardia en sus reivindicaciones

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Algunos siguen al pie del cañón, pero otros han dado el relevo tras varios años de trabajo. Es el caso de Milagros Muñoz, presidenta de la asociación de vecinos de la barriada Sudamérica, y de Manuel Jesús Viñas, ex presidente del Barrio Obrero. Ambos darán nombre a dos calles de la nueva urbanización del Juncal, en la Zona Norte. Pero no estarán solos. Les acompañarán en el callejero cinco personas más que también han liderado o lideran las asociaciones de sus respectivas barriadas. El Ayuntamiento de El Puerto ha decidido reconocer la labor constante del movimiento vecinal en el núcleo residencial de la ciudad con mayor expansión.

«Me sentí muy sorprendida, porque nosotros no estamos aquí para que nos reconozcan nada, sino para luchar por mejorar la calidad de vida de nuestros barrios». Mercedes Muñoz, 'Uchi', está al frente de la asociación Sudamérica desde hace una década pero acumula bastantes más años de experiencia en el movimiento vecinal. Una inversión de tiempo y trabajo, a veces ingrato, que se ha traducido en mejoras para la barriada que quizá sin la insistencia del colectivo no habrían sido tenidas en cuenta por el Ayuntamiento. Como ejemplo, algo tan sencillo como el pintado de un nuevo paso de peatones en un cruce de la avenida de Valencia, que sin embargo ha costado no pocos meses de reivindicaciones. «Mi objetivo ha sido que mi barrio fuera un buen lugar para vivir, con todos sus servicios en condiciones porque eso es bueno para mi familia, mis hijos y mis nietos, pero también para todos el vecindario».

En su caso, esta labor ha trascendido el propio ámbito de Sudamérica para implicarse en la Federación Local de Asociaciones de Vecinos y en los consejos de distrito. «Porque hay cuestiones que reivindicar, como el buen funcionamiento de los autobuses o la limpieza, que son de toda la ciudad». Fue el alcalde, Enrique Moresco, quien le comunicó personalmente vía telefónica el nombramiento de una calle con su nombre. «Yo estoy muy agradecida, pero esto no significa que pactemos con nadie ni que bajemos la guardia. Vamos a seguir trabajando igual».

Mucho por hacer

Manuel Jesús Viñas, con treinta años de movimiento vecinal a sus espaldas, recordó que queda mucho por hacer. «El trabajo en la Zona Norte no debe decaer, porque cada vez hay más población y quedan aún muchos servicios por mejorar. Proyectos tan importantes como el nuevo centro de salud y otros que dependen de nosotros, como implicar a los jóvenes en sus barriadas».