Los desembalses se reducen al mínimo y se recupera la normalidad

Lo delicado de la situación de los embalses y el río Guadalete ha pasado, al menos, de momento. Ayer los técnicos que gestionan las presas de la cuenca del Guadalete volvieron a reducir los desembalses de los pantanos de Arcos y Bornos, generando un alivio mayor en el río Guadalete a su paso por Jerez que provocó una bajada importante en el nivel del mismo. En concreto, el nivel del río se redujo hasta 4,20 metros, alejándose mucho de los 5,50 metros a los que suelen comenzar los problemas de inundaciones.

La clave de la bajada de los desembalses se encuentra en Zahara de la Sierra, donde el aliviadero natural ya prácticamente no suelta agua sobre el de Bornos. En concreto, sigue estando por encima del 100% de su capacidad y ya sólo suelta 5 metros cúbicos por segundo. Al recibir Bornos y Arcos menos agua, este último es simplemente una presa de regulación, el viernes se redujeron los desembalses a 75 metros cúbicos por segundo, el sábado a 50 y ayer domingo a sólo 30. En plena efervescencia del temporal, los embalses de la cuenca del Guadalete llegaron a soltar 200 metros cúbicos por segundo aunque llegaron a recoger unos 900, evitando una avenida mucho más importante sobre el Guadalete.

No obstante, aunque los datos son positivos, el temor sigue instalado en torno al río porque las presas siguen estando llenas y se prevén nuevas precipitaciones para esta misma semana.