Alberto Ruiz-Gallardón, tras un Consejo de Ministros. :: J. R. LADRA
ESPAÑA

El Constitucional respalda una reforma de Zapatero que derogará Gallardón

La corte rechaza un recurso del PP de 2004 contra el sistema de elección de altos cargos judiciales que aprobaron los socialistas

MADRID. Actualizado: Guardar
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Cosas del destino, y de la lentitud en la Justicia. El Tribunal Constitucional validó ayer la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial aprobaba por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2004, que modificó el sistema de nombramiento de altos cargos judiciales al tener que designarse por una mayoría de tres quintos del pleno del Consejo, es decir, por 13 de los 20 vocales más el presidente.

Sin embargo, el aval del Constitucional, que rechaza el recurso presentado en 2005 por el PP, podría tener los días contados si sale adelante la reforma que plantea ahora el Ministerio de Justicia, que es partidario de regresar al sistema de mayoría simple para designar a la cúpula judicial.

En su día, el PP impugnó el actual sistema porque, con la nueva mayoría cualificada que propuso el PSOE, los vocales que procedían de la carrera judicial perdían peso frente a los juristas -fiscales, secretarios judiciales, catedráticos- y acusó al entonces ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, de «cambiar las reglas del juego en medio del partido».

'Carta blanca'

En la sentencia conocida ayer, el alto tribunal advierte de que las críticas del PP al «clientelismo» que iba a generar la reforma de 2004 no son motivo suficiente para hablar de inconstitucionalidad y que «una mayoría tan amplia» como la exigida para la cúpula judicial contribuye a estimular un amplio consenso en el seno del Consejo.

La resolución rechaza igualmente que la reforma aprobada en su día por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero incurriera en «vicios de procedimiento» que el PP asociaba en su día a la elaboración del proyecto de ley. Y recordaba que el legislador tenía 'carta blanca' para elegir el sistema que quisiera para los nombramientos de la cúpula judicial (presidente de tribunales superiores y de audiencia provinciales y magistrados del Supremo o de la Audiencia Nacional).

El ponente del fallo, el magistrado Pablo Pérez Tremps, recuerda además que el cambio de modelo de elección de jueces tenía como objetivo «fortalecer el mérito y la capacidad para evitar un sistema de mayorías que no contribuía a crear una justicia de calidad, perjudicando su imagen y pudiendo enturbiar su independencia», por lo que no puede hablarse de ley arbitraria.

Esta referencia es una crítica explícita al nuevo modelo de Consejo que pretende Alberto Ruiz Gallardón. El ministro pretende la vuelta a la mayoría simple para los nombramientos de altos cargos judiciales, es decir, con 11 de los 20 vocales más el presidente bastaría, con el objeto de «desbloquear» las designaciones por falta de acuerdo o acabar con lo que se ha venido a llamar «cambio de cromos» entre las asociaciones judiciales.