El Congreso insta por primera vez al Gobierno a que prevenga los suicidios

El Congreso de los Diputados dio ayer un toque de atención al Gobierno en materia de salud mental y más en concreto en la tragedia que suponen los suicidios. Auspiciada por UPyD, todos los partidos políticos -incluído el grupo parlamentario popular- aprobaron una proposición no de ley para que se trabaje más en este campo, que los grupos consideraron que está abandonado. En el documento, los diputados critican la Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud 2009-2013 del departamento de Ana Mato. Cuando habla de este drama, que en 2010 se cobró la vida de 3.158 personas -según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE)-, «solo menciona la tasa resultante de estos datos y el registro de altas hospitalarias que el propio documento no valora como fiables y acciones de las comunidades autónomas para disminuir las tasas de depresión y de suicidio en grupos de riesgo».

La proposición no de ley insiste en que es necesario trabajar en la prevención. «Hay una estimación de un millón de suicidios en el mundo al año. Por cada uno que muere, se producen 200 intentos», recordó la portavoz de UPyD, Rosa Díez, durante la defensa del proyecto. «Hay que dar visibilidad a los sucidios», apuntó por su parte el peneuvista Emilio Olabarria, quien felicitó a Díez por impulsar esta iniciativa. En esta búsqueda de dar luz a los suicidios, Olabarria destacó que hay más casos de los que las estadísticas oficiales determinan, como aquellos conductores que optan por el accidente de tráfico para acabar con sus vidas.

El resto de los portavoces parlamentarios recordó el drama que supone la pérdida de una vida humana, que ha tenido una mayor repercusión con otra tragedia, la de aquellas familias que pierden su casa por no poder pagar sus deudas con los bancos. Pero además de este hecho puntual, la proposición no de ley insta al Gobierno a trabajar en tres campos concretos: promover campañas de visibilización, apoyar a la red de Salud Mental y modificar de los «objetivos y las acciones» de la estrategia de salud mental y desarrollar políticas transversales que incorporen la perspectiva de género y presten a los grupos más vulnerables.

Entre estos colectivos se encuentran ancianos y personas en riego de exlusión, niños y adolescentes. Precisamente los menores fueron mentados por los diferentes grupos en sus discursos. Entre 2008 y 2010, murieron 131 menores, según los datos del INE. El suicidio es la tercera causa de muerte en personas de entre 15 y 44 años y la segunda en personas de entre 10 y 24. España es el tercer país del mundo en número de suicidios juveniles. «Es la epidemia silenciosa del siglo XXI», apuntó la popular María del Carmen Quintanilla.

Críticas

A pesar de la unanimidad en el apoyo, los socialistas lanzaron un recado al Gobierno. «No recorten en atención sanitaria, en atención a la dependencia, en pensiones, en planes sociales, en política de igualdad ni en educación», indicó Guadalupe Martín, quien aprovechó su intervención para solicitar a la ministra de Sanidad su comparecencia para que explique cómo va a garantizar el cumplimiento de esta iniciativa.

Una medida «necesaria», según Gaspar Llamazares, ya que la crisis ha provocado un aumento del 20% en los casos de depresión «sobre todo entre las personas sin prestación», una de las causas de los suicidios en España.