Un chico vestido de Eduardo Manostijeras. :: VÍCTOR LÓPEZ
Sociedad

No todo es manga

Pese a que la mayoría de disfraces del Salón se basan en el cómic nipón, cada vez más se inspiran en el cine

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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Los protagonistas de los manga 'Death Note' y 'Naruto' rivalizaban ayer en el patio de San Felipe Neri con Joker, Batman, Harry Potter o los personajes de las películas 'V de Vendetta' o 'Avatar'. Y es que no por llamarse Salón del Manga, la cita gaditana se consagra al cómic japonés, ya que cada año, son más los cientos de jóvenes asistentes que optan por inspirarse en el mundo del cine o la literatura fantástica para elaborar su trabajado disfraz (el arte del 'cosplay', para los entendidos).

Ayer, el día grande del evento juvenil más importante del año en la capital, congregó miles de jóvenes adolescentes dispuestos a divertirse con los juegos, sesiones de karaoke y música japonesa, batallas y concursos organizados por los chicos de Aniraise, los artífices hace seis años de tan curiosa cita.

Sin duda, quienes acapararon más miradas fueron Ana y Francisco Javier, que durante un día se pusieron literalmente en la piel de Neytiri y Sully, la pareja de la extraña raza alienígena que James Cameron parió para 'Avatar'. Con el cuerpo pintado desde la cabeza hasta los dedos de los pies, los dos jóvenes reconocían ayer que sus amigos mezclaron pintura acrílica con crema hidratante para aplicársela sobre la piel sin riesgo de quemazón y picor. Cuatro horas tardaron en adquirir el brillante azul que caracteriza a estos mágicos seres que viven en contacto constante con la naturaleza.

No fueron los únicos personajes de cine que desfilaron ayer por San Felipe. Si uno miraba alrededor podía encontrarse a Batman y Robin departiendo refresco en mano o con una auténtica clase de magos de Hogwarts pertrechados con su infalible varita. Además, también había espacio para los videojuegos y las series, de la mano de varios espontáneos Mario Bros o tres chicos que simulaban ser los protagonistas masculinos de 'Cómo conocí a vuestra madre', con tan solo unas inquietantes caretas de cartón tapándoles la cara. Aun así, lo que todos estos chavales compartían es un sano deseo de imaginar, disfrutar y ponerse por un día en la piel de sus personajes favoritos.