Los recortes en el hospital provocan esperas de hasta cuatro días para una cama

Que una anciana se fracture la cadera desgraciadamente es un accidente relativamente frecuente entre la tercera edad y, en principio no tiene por qué acarrear consecuencias graves si se trata como es debido. El problema surge cuando la perjudicada en cuestión acude al servicio de Urgencias del Hospital del SAS de Jerez y acaba permaneciendo allí cuatro días a la espera de que la ubiquen en una cama para poder ser intervenida.

Esto ocurrió hace unos días en el citado centro tal y como se ha relatado, según fuentes del sindicato CGT, que han vuelto a poner sobre la mesa las dificultades provocadas por el programa de recortes del Servicio Andaluz de Salud durante el verano. Como argumentan desde la organización, de 518 camas con las que cuenta el recinto se han dejado habilitadas 432 para el mes de agosto (86 menos), y en algunas plantas el cien por cien de las habitaciones permanecen cerradas.

Éste sería el caso de ginecología, cardiología, urología y otorrino, frente al 50% que se ha visto afectado en pediatría. En cuanto a consultas externas, cifran en hasta un 60% el porcentaje de las mismas que está dejando de funcionar y algo muy similar en el caso de los quirófanos, que estarán operativos solo siete de los 13 de los que dispone el hospital. No obstante, estas fuentes aclaran que en casos de extrema necesidad existen camas de reserva que se adaptan a las circunstancias, aunque no suele ser lo habitual.

«Están derivando enfermos a plantas de otras patologías porque las de las suyas están cerradas, lo que provoca que a su vez otros pacientes tengan que ser desplazados y que esto no se acabe nunca». Aquellos que en un primer momento se quedan sin camas permanecen en urgencias a la espera de que les encuentren un hueco, algo que en algunos casos tiende a eternizarse. «En el caso de la anciana que llevaba cuatro días esperando tuvimos que hablar con el supervisor para que le echara una mano -contaron estas fuentes-. Pero como éste, hay miles de casos más».

El quid de la cuestión radica en que, según CGT, el SAS da por hecho que en esta época del año se reduce la demanda debido al éxodo vacacional de los jerezanos y demás población cercana que pertenece al área asistencial hospitalaria. Sin embargo, desde el punto de vista del sindicato se produce justo lo contrario, puesto que muchos de los veraneantes de la costa más cercana ante cualquier tipo de contratiempo o urgencia médica acuden directamente al Hospital de Jerez.

Vacaciones sin cubrir

«Otro de los problemas es que esto va de la mano de un recorte de personal, pues tampoco se cubren las vacaciones como debieran y ante una demanda importante resulta que los pacientes se encuentran con la mitad de los trabajadores de ese servicio». Otro suceso llamativo ocurrió el pasado domingo, como ha contado a LA VOZ una sanitaria del centro. Aquel día se llegaron a asistir hasta 18 partos, lo que produjo un colapso absoluto en el área de tocología y una parturienta tuvo que ser derivada a Sevilla.

Según esta profesional, en ocasiones muy puntuales y especialmente si se trata de casos delicados se deriva a las pacientes a hospitales cercanos como los de Cádiz, Puerto Real o Virgen del Rocío. En esta ocasión en ninguno de ellos había camas disponibles, así que fue trasladada al Hospital de Valme, en la capital hispalense. «No sé si desde ese día ha habido más casos, pero los jefes del servicio dieron a entender que no será la primera vez que tengan que recurrir a ello en días de gran demanda».

Esta mujer fue desplazada a Sevilla, como afirma la sanitaria, porque contaba con 30 semanas de gestación y el parto podía implicar cierto riesgo. «Si hubiera sido otra, la hubieran metido en cualquier sitio - subrayó-. El pasado fin de semana se estuvo a tope, fue exagerado de partos e ingresos, hubo un desbordamiento total».

En lo que se refiere al descenso de personal, ya Comisiones Obreras advirtió a principios de verano de que las bajas se cubrirían solo en un 63%, con lo que casi el 40% de los trabajadores en vacaciones se quedarían sin sustitutos. Una realidad que se ha hecho palpable en lo que va de verano, y que sumada a la reducción de camas hace que el colapso se multiplique en diversas ocasiones, según denuncian los sindicatos.

Además, desde CC OO recuerdan que en el pasado año ya se firmaron 33 contratos quincenales menos que en 2009, y esta cifra ha seguido decreciendo puesto que en 2011 se han tramitado otros siete menos. «Se deberían cubrir el cien por cien de las vacaciones -insisten-, pero al final todos los años son iguales e incluso vamos a peor. Es lo que hay y no se puede hacer más, puesto que hace tiempo que se han primado los criterios económicos por encima de algo tan importante como es la asistencia al paciente».

Ante este panorama, los profesionales esperan que el área más susceptible de saturación como es la de urgencias no llegue a los límites de otros años, pues reconocen que los sanitarios de guardia no darán abasto para atender a todo el que lo requiera y ello podría derivar en alguno de los episodios desagradables que se han vivido durante momentos de máxima tensión entre sanitarios y usuarios.