Una decena de jóvenes ocupa el Colegio Valcárcel de Cádiz para exigir el fin de su abandono

Una pancarta puso a La Viña y sus alrededores en alerta. «Valcárcel recuperado para el pueblo» rezaba la inmensa lona que a las 20 horas de la tarde desplegaron un grupo de unas 13 personas en la azotea del antiguo Colegio Valcárcel. Lo que parecía una simple ocupación echaba a andar para hacer gala de una organización integrada por redes sociales, comunicados de prensa, abogados e incluso un informe técnico del edificio. Eso se producía desde algún punto indeterminado de Cádiz. Mientras, en el propio edificio Valcárcel comenzó a acumularse gente en el exterior (hasta llegar a casi un centenar de personas) que se solidarizaba con la causa.

Un objetivo que los propios organizadores hicieron público tanto en un manifiesto como en una nota de prensa. Pretenden «denunciar el estado de abandono del edificio» y «recuperar Valcárcel para volverle a dar el uso público que siempre tuvo». En este sentido hacen un llamamiento a que participe el conjunto de la ciudadanía de Cádiz y haga suya «la recuperación de Valcárcel». Un movimiento con el que además se intenta evitar la transición de uso público a privado con el proyecto de hotel que en estos momentos se encuentra paralizado.

La idea de los organizadores es convertir el edificio en un centro social «para el encuentro de todos los gaditanos». Así, la ocupación «cívica y pacífica» -según el manifiesto- se centró ayer en limpiar las zonas del edificio que pueden ser utilizadas. «Está lleno de basura y de cristales, el objetivo es limpiarlo para que todos los gaditanos puedan utilizarlo», explicó ayer uno de los organizadores.

De hecho, la pretensión de este movimiento ciudadano es abrirlo para que el pueblo inicie un proceso de recuperación del mismo, «dando un uso popular a este emblemático edificio en un contexto de recuperación horizontal, pacífica, autogestionada y desvinculada de organizaciones políticas». Asimismo con esta acción pretenden denunciar el estado de abandono en el que se encuentra este edificio.

Un estado precario que, sin embargo, no supone riesgo para su uso. «Poseemos un informe técnico propio en el que se determina qué puntos del edificio se pueden usar sin ningún tipo de riesgo». A partir de ahora «serán los gaditanos los que decidan qué hacer con el edificio», puntualizaron los organizadores. De hecho, a las 22 horas de ayer se celebró una asamblea en el exterior del inmueble en la que se decidió mantener la ocupación del edificio propiedad de la Diputación de Cádiz. Por su parte, efectivos de la policía Local y Nacional se personaron en el lugar aunque descartaron desalojar el edificio.