Hacienda coloca vigilantes por un fallo en la alarma que ya dura más de 20 días

Como si Murphy hubiera elaborado su famosa teoría basándose en lo que le ocurre al Ayuntamiento. De todas las dependencias municipales que están repartidas por la ciudad, la alarma que se estropeó tuvo que ser la del área de Economía y Hacienda, edificio en el que se llevó a cabo el supuesto robo de casi ocho millones de euros. Debido a la importancia de los documentos que hay en su interior así como la recaudación de la caja, el Consistorio tuvo que poner durante más de 20 días vigilancia nocturno, lo que llamó la atención a los vecinos de la zona, ya que la oficina se encontraba con la baraja medio abierta y las luces encendidas a altas horas de la madrugada. Esto hizo que los rumores se extendieran. Lo curioso es que también cogió desprevenida a la Policía Local, que no fue hasta hace una semana cuando descubrió este hecho. A las cuatro de la mañana del sábado de la semana anterior varios agentes, alarmados por las luces, decidieron entrar en el edificio, siendo el empleado de la empresa contratada para tales servicios el que tuviera que explicar la situación. Tampoco se le informó a la delegada responsable del área, Mercedes Espejo, que justificó el que las luces estuvieran encendidas a que la alarma, que se encontraba estropeada, hubiera saltado por algún motivo, haciendo que los agentes tuvieran que acudir hasta el lugar para desconectarla.

El horario de las vigilancias eran de diez de la noche a ocho de la mañana, aunque hubo días que comenzaron más tarde. La alarma no se pudo arreglar de inmediato porque no se había renovado el contrato con la empresa encargada de su mantenimiento, así que no fue hasta el pasado jueves cuando la delegación volvió a la normalidad y por tanto se suprimieron las vigilancias que se llevaron a cabo durante varias semanas.