Vista aérea del islote que muestra la pasarela que une la fortaleza con la ciudad. :: T.S.
CÁDIZ

Tan cerca, tan lejos

El presidente del Consorcio del Bicentenario se muestra reacio a una posible ampliación del paseo Fernando Quiñones El Castillo de San Sebastián está a la espera del veredicto de los informes de Medio Ambiente y de Cultura

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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La posibilidad de que los coches lleguen hasta el interior del Castillo de San Sebastián es algo «inconcebible» para el presidente del Consorcio del Bicentenario Luis Pizarro quien se ha mostrado reacio ante una posible ampliación del paseo Fernando Quiñones planteada con este fin.

Es más, recoge el consejo que a menudo se hacen desde las autoridades sanitarias sobre la necesidad de andar y ejercitar las piernas para estar en forma para aplicarlo a esta zona y decir que para llegar al Castillo no hay nada mejor que «darse un paseo, sobre todo en una zona tan bella a la vista».

Sin embargo una de las explicaciones dadas para el ensanchamiento del paseo es permitir la llegada no de cualquier vehículo sino la de camiones de bomberos o ambulancia, aunque el proyecto, al que ya han presentado varias alegaciones también contempla la creación de piscinas en los lados del paseo.

Para el representante de una de las entidades propulsoras de la rehabilitación de este inmueble histórico, no hay necesidad de cambiar el ancho del camino, «sobre todo si lo que estamos buscando con todo el proyecto es dar respuestas no agresivas con el entorno». Esta premisa es la que también defienden la plataforma Salvemos La Caleta y diversos colectivos ecologistas de la ciudad quienes en varias ocasiones han mostrado su rechazo profundo a la construcción del muelle del Socorro previsto en la zona del castillo. Pizarro no quiso adherirse a ningún bando de forma clara aunque si esperó que al final se pueda atender de alguna forma a la demanda social.

Sin embargo especificó que, una vez que ha estudiado más a fondo el proyecto, y en el caso de que se dé luz verde al espigón, «habrá que construirlo entero».

De momento ha hecho un llamamiento a la calma y sobre todo a la espera pues todavía quedan por saber el dictamen final de los informes elaborados por el Ministerio de Medio Ambiente y Cultura que expondrán el impacto que podría tener dicho muelle para el entorno de la Caleta.

A la espera de soluciones

Una vez que se tenga conocimiento de la repercusión que tendría el muelle del Socorro, el Ministerio y la empresa encargada de ejecutar las obras del Castillo, Tragsa, deberán tomar una decisión firme en cuanto a la modificación del proyecto en el caso de que sea necesario. Decisión que Pizarro espera que «contemple las peticiones de los movimientos sociales de la ciudad».

Aunque todavía no hay una resolución clara, a finales del mes de abril se dio a conocer un informe de la delegación de Medio Ambiente en la que se advertía del «riesgo de dañar el ecosistema de La Caleta si se procedía a dragar la zona para la creación del espigón». Desde la misma delegación ya advirtieron que este informe no era vinculante pero hacía referencia a posibles especies que se verían afectadas y del riesgo de vertidos que podrían producirse si se llega a construir el malecón.

La plataforma Salvemos La Caleta prefiere no esperar cruzadas de brazos y está llevando a cabo una campaña de recogidas de firmas en contra del proyecto.