Un adicto al porno, entre los 'príncipes' de Corina

Siguiendo la estela de '¿Quién quiere casarse con mi hijo?', aterrizó anoche en Cuatro 'Un príncipe para Corina'. Como no podía ser de otra manera, la casamentera oficial de Mediaset, Luján Argüelles, fue la encargada de conducir un espacio que, por ahora, tiene mucho de cómico y poco de romántico. Basta con echar un vistazo rápido a los pretendientes, divididos en cuatro grupos: guapos, simpáticos, 'nerds' y únicos.

Entre ellos destacan el chino-vasco adicto al porno, que asegura que el cine para adultos no le gusta, pero lo ve "por necesidad" y Pedro Garcés, que fue expulsado tras asegurar, ante la atónita mirada de Corina, ser un vampiro de 2.800 años muy habilidoso con la costura. Tampoco pasó desapercibido en las redes sociales el 'tierno' policía que se emociona al hablar de su bebé -un perro- y que escucha a Alejandro Sanz y Pablo Alborán.

Tanto el agente como el adicto al porno se salvaron, pero no corrió la misma suerte el vampiro, que fue expulsado junto con Arnau Esteve, un 'nerd' que le juró lealtad, el 'enemigo de los feos' Restituto y el 'guapo' Pau Montaner, en este último caso por error de Corina, que a buen seguro hubiese preferido mandar a su casa a Jorge Caín, otro 'guapo' que no tuvo reparos en mostrar su interés por la hermana -y consejera- de la protagonista.

Pese al éxito en Twitter, donde el 'reality' se convirtió en trending topic a los pocos minutos de comenzar, el programa de Cuatro se tuvo que conformar con 1.355.000 espectadores, cifra que se traduce en un flojo 7% de cuota de pantalla, por debajo de las cifras a las que estaban acostumbrados en la cadena con los 'tróspidos'. Corina y sus pretendientes se merecen una oportunidad porque pueden dar mucho juego.