Música

Mayte Martín vuela sin red

"En el flamenco no se perdona a los bichos raros", lamenta la intérprete, que pide respaldo a su público para grabar un disco de boleros

MADRID Actualizado: Guardar
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"Toda mi vida he hecho lo que me ha pedido el corazón y jamás me he arrepentido". Lo dice con una convicción extrema Mayte Martín (Barcelona, 1965) una de las más vitales, sensibles y singulares voces del flamenco actual. No se resigna a quedarse en ese mundo exclusivo y cerrado "en el que ni se admiten ni se perdona a los bichos raros ni a los pájaros solitarios". Martín, que sabe que encaja en ambas categorías, seguirá caminando en solitario por derroteros poco transitados. Así que aparca soleás, tarantas, fandangos y otros palos para grabar un disco de boleros y canciones de amor al margen de la industria. Se titulará 'Cosas de dos' y es todo un reto para la cantante, que pretende financiarlo con la ayuda de su fidelísimo público. "He pagado muy caro el precio de mi libertad y empieza una nueva etapa de mi vida con dos únicos protagonistas: mi público y yo. Mi carrera es ahora cosa de dos", se ufana.

Escaldada de todas sus experiencias con la industria discográfica, da la espalda con un sonoro portazo "a multinacionales e independientes". Con este acto de valentía "que es como un grito de libertad" está dispuesta a coger las riendas de su carrera y desafiar las normas del mercado, convirtiéndose en su propia discográfica "y poniendo en manos de mi público la producción y la publicación de mis creaciones". "La fórmula eliminará intermediarios; protegerá mi sensibilidad artística y la preservará de intereses comerciales y económicos", dice muy segura de sí.

"Era necesario para acabar con una incoherencia que no está en sintonía con mi manera de sentir y entender la vida", dice esta artista que lleva 37 años "haciendo mi santa voluntad". "Es lo que me ha permitido seguir adelante, pagando, insisto, un altísimo precio". Penó en Cataluña casi anti-flamenca, pero hoy "por fortuna las cosas son distintas. El arte es cosa de talento, no de genes. Puedes catalá o ser de Alaska y cantar por bulerías y ser hijo de un grande del flamenco y cantar como un perro".

Desafío

Sabe que dar este paso "supone dar un salto sin red", pero está dispuesta a hacerlo y a asumir las consecuencias. "Tengo que hacerlo para preservar mi ilusión de seguir creando y para recuperar las ganas de publicar mis trabajos". "Creo plenamente en lo que hay al otro lado y confío ciegamente en la historia de amor que tengo con mi público", explica risueña ante su nuevo desafío.

Su relación con la industria "está agotada" y no quiere seguir ni un segundo más "en un corsé que te impide respirar". "Jamás me he movido en términos de rentabilidad. No soy ni seré un producto. No me muevo en los parámetros que interesan a la industria porque no soy manipulable ni me ciño a las modas. Me muevo por impulsos y sigo los dictados de mis vísceras, que me señalan qué hacer en cada momento. Ni negocio mi libertad ni me presto a ese circo en que se ha convertido el arte, algo que debería ser sagrado", se duele.

"Hay tal nivel de fragilidad en lo que hago que el miedo al maltrato comercial me ha causado en estos años una suerte de parálisis productiva", reconoce. "Así que ha llegado el momento de coger el timón, de cambiar el rumbo de las cosas y no permitir que nadie se interponga en mi camino ni lastime mi ilusión creativa".

Colaboración

La grabación de 'Cosas de dos' tendrá lugar una mítica sala de Barcelona, Luz de gas, los día 11 y 12 de mayo. Se la plantea Mayte Martín como "un regalo" para su público, al que ofrece distintas fórmulas de colaboración a través de su página para financiar la grabación y la edición del disco "bajo mi propio sello". Se lo pagará "volviendo a poner sobre el escenario mi historia vital".

Nadie debe extrañarse de que esta cantaora atípica y alérgica a los faralaes apueste ahora por los boleros. "He sido siempre una artista libre y solo concibo el artes como fruto del discurso emocional y la libertad creativa, que me pedían en este momento hacer un disco así". Recuerda además que el bolero corre por sus venas desde su infancia, que "lo alternaba con el flamenco desde los diez años" y que cada año ofrece un concierto de boleros y canciones de amor en Barcelona "que me apetecía fijar en un disco".

"Si manipulara mi impulso creativo para ir en otra dirección, con el único anhelo de ser más conocida como cantaora de flamenco y facilitarme el acceso al público o el interés de los medios, faltaría al principio básico en el que se apoya mi decisión de emanciparme de la industria", resume esta creadora sin etiquetas que en casa consume "tango, música brasileña y algo de clásica". "Oigo muy poco flamenco, con excepciones como la Niña de los Peines o Morente, que hizo un uso inteligente y honesto de su libertad; escuche lo que escuche voy siempre a la raíz, como Piazzola o Pugliese en el tango", precisa.

Habrá en su nuevo disco boleros clásicos como 'Espérame en el cielo', 'Piel canela', 'Regálame esta noche' o 'Yo lo comprendo' además de temas inéditos como 'Por si te quedas', que le compuso su hermano, además de una versión de 'En un rincón del alma' de Alberto Cortez.