Fotografía de archivo de Valeriano Gómez.
crisis en el ejecutivo

Valeriano Gómez, un puente tendido a los sindicatos

El perfil sindicalista y negociador del ex secretario general de Empleo puede ayudar a encauzar el diálogo social

MADRID Actualizado: Guardar
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El nombramiento de Valeriano Gómez (Arroyo del Ojanco, Jaén, 1957) como nuevo ministro de Trabajo e Inmigración es un puente tendido a los sindicatos y una clara apuesta por el restablecimiento del diálogo social. Economista de formación, la trayectoria profesional de Gómez ha discurrido muy próxima a la Unión General de Trabajadores. Contribuyó de forma decisiva a la búsqueda de una solución para el problema de la PSV, la cooperativa de viviendas que, con su fracaso, minó el prestigio de la central socialista y de su histórico líder Nicolás Redondo. En la actualidad, Valeriano Pérez asesora al Consejo Económico y Social por designación de UGT, al tiempo que trabaja en el Instituto Universitario y de Investigación Ortega y Gasset.

El nuevo ministro de Trabajo, que accede al cargo en momentos en que el número de parados ronda los cuatro millones y medio, conoce bien el mercado laboral y es abierto partidario de buscar el consenso con los agentes sociales. Fue secretario general de Empleo entre marzo de 2004 y finales de 2006, cuando Jesús Caldera dirigía este departamento, pero abandonó el cargo mediada la legislatura. Detrás de las “razones personales” que alegó había una fatiga agudizada en el intenso periodo de negociaciones con los interlocutores sociales que precedió a la puesta en marcha de la anterior reforma laboral.

Desde entonces, Gómez ha seguido muy de cerca las medidas económicas y sociales decididas por José Luis Rodríguez Zapatero y no ha ocultado el rechazo que le ha podido inspirar alguna de ellas, hasta el punto de asistir a la manifestación convocada por los sindicatos el pasado 29 de septiembre, en protesta por una reforma que tiene su principal eje en el abaratamiento del despido. Ha defendido por escrito soluciones al problema del paro mediante cambios que potencien la flexibilidad interna dentro de las empresas (jornada laboral, reciclaje a través de la formación, movilidad en los puestos de trabajo).

También tiene ideas claras el nuevo responsable de Trabajo sobre otras cuestiones urgentes de la agenda de este departamento. Para contribuir a la creación de puestos de trabajo, propugna más inversión en políticas activas de empleo, hasta conseguir destinar a ellas más recursos que los dedicados a subsidiar el paro. Y tiene igualmente formada, y publicada, su opinión sobre las reformas necesarias en el sistema de pensiones. Frente a la propuesta que puso sobre la mesa el Gobierno, centrada en el alargamiento de la edad de jubilación, sugiere una aproximación gradual, que tome en cuenta que los problemas arrancarán en 2025, y apuesta por una mayor contribución de los impuestos a la futura financiación.