Algeciras se blinda ante el terrorismo para la Operación Paso del Estrecho

Más de tres millones de personas y 600.000 vehículos ponen en estos días rumbo a África. Trabajadores marroquíes de toda Europa aprovechan los meses de verano para ir a visitar a sus familias.

Pero este no es un año más, los atentados terroristas que han sacudido Europa han ocasionado que la alerta entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y también entre la población sea mayor. Las aglomeraciones de personas y los grandes flujos de entrada y salida pueden ser aprovechados por los terroristas para causar el pánico, infiltrándose entre los que van o vienen. Las autoridades no hablan explícitamente y en público de ello pero se sabe y se actúa para que nada ocurra durante la Operación Paso del Estrecho (OPE) 2017.

El 28 de junio, trece días después de que comenzase la OPE, Ciudadanos pedía más agentes y medios para esta Operación en los puertos de Algeciras y Tarifa. El diputado por Cádiz en el Congreso, Javier Cano, alegaba que el año pasado «el Gobierno ya se vio desbordado» por el enorme flujo de personas y vehículos y aludía al riesgo de amenaza terrorista «algo que sin duda debe tener en cuenta el Gobierno para reforzar e incrementar el número de agentes de la operación Paso del Estrecho».

Más vigilancia

La necesidad es evidente. Tanto es así que el 3 de julio, 29 guardias civiles, procedentes de diferentes unidades del territorio español, llegaron a la Comandancia de la Guardia Civil de Algeciras para incorporarse como refuerzo con motivo de la Operación Paso del Estrecho. De este modo, el puerto de la ciudad se ha visto reforzado con 14 guardias civiles, el de Tarifa con ocho, el Servicio Cinológico de la Comandancia con cuatro y la Unidad Orgánica de Policía Judicial con tres.

Por su parte, la Policía Nacional ha reforzado los controles de entrada y de salida, aunque no facilita el dato del número de agentes. Se incorporan en Algeciras una Unidad de Guías Caninos, brigadas móviles (Policía en el Transporte) en los barcos en el trayecto de Algeciras a Ceuta y Unidades de Intervención Policial (UIP). A todo ello hay que añadir el Centro Regional de Coordinación de Puestos Fronterizos, que forma parte del proyecto «Fronteras Inteligentes» y desde el que se coordinan los puestos fronterizos de Algeciras, Tarifa, Ceuta y Melilla.

En total, la Operación Paso del Estrecho 2017 se ha reforzado con 190 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil en los puertos de Tarifa y Algeciras, un 25% más que en 2016. A los que se suma el dispositivo de la DGT, con 16 traductores y ATS en las áreas de descanso, 10 funcionarios en el centro de Cádiz y 180 agentes asignados a la vigilancia de carreteras por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, apoyada por dos helicópteros.

Todo ello para llevar a cabo labores de mantenimiento del orden público en los puertos, el resguardo fiscal del puerto de Algeciras, la protección del área de emergencia de Los Barrios y, por supuesto, la tarea de prevención y protección que se realiza dentro del nivel de alerta 4 antiterrorista.

Este nivel, que significa que España se encuentra en riesgo alto de atentado, se decretó hace dos años. En la práctica, supone que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han reforzado su vigilancia a posibles terroristas, así como la protección de estructuras críticas y centros sensibles, como pueden ser estaciones de trenes, autobuses, puertos, aeropuertos o centrales nucleares. Además, se ha incrementado el número de agentes que vigilan las calles y los militares han aumentado la seguridad en sus instalaciones.

Unas medidas a las que, en este tiempo, se han unido otras adicionales, como mayor seguridad en las zonas turísticas o prohibir la circulación de camiones en determinadas zonas y fechas. Un ejemplo: el refuerzo con 2.639 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil a las zonas de mayor afluencia turística, entre las que se encuentra Andalucía, durante los meses de julio y agosto, lo que supone duplicar los efectivos del año pasado y alcanzar la cifra más alta desde 2011.

Control de pasajeros

El terrorismo yihadista es, junto con el crimen organizado, «la mayor amenaza a la que nos enfrentamos todas las sociedades que queremos vivir en paz y libertad. Por ello hay que combatirla desde el plano operativo, político y social», así de claro se mostraba el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, en unas recientes declaraciones. En lo que va de año, se han realizado 30 operaciones antiyihadistas en España, con un total de 44 detenidos.

Precisamente al último de ellos, un yihadista danés de origen sirio detenido en Málaga que pretendía adquirir armas en España, se refirió Zoido durante la rueda de prensa posterior a la Reunión del G4 de ministros del Interior de España, Marruecos, Francia y Portugal, celebrada en Sevilla a principios de julio. Durante la misma, el titular de Interior subrayó que «el refuerzo de Policía Nacional y de Guardia Civil en Algeciras y la Línea no tiene comparación con ninguno de los que se han producido antes».

El G4 aprobó en Sevilla una declaración que establece un plan de acción en la gestión de flujos migratorios, la lucha contra el tráfico de drogas, la cooperación policial y la lucha contra el terrorismo. A este respecto, la declaración recoge que «el objetivo de los servicios de lucha contra el terrorismo es proceder a la detección de las personas que puedan viajar hacia y desde las zonas de conflicto, prevenir y evitar su salida y hacer un seguimiento de sus movimientos» y se hace especial hincapié en los sistemas de registro de nombres de pasajeros como «herramienta esencial en la lucha contra el terrorismo».

De ahí la importancia de la Operación Paso del Estrecho, durante la que cruzarán por los puertos de Algeciras y Tarifa 67.500 pasajeros y 14.460 vehículos diarios hasta el próximo 15 de septiembre, cuya mayor afluencia se espera a finales de julio.

Entre estos ciudadanos que cruzarán el estrecho está Lucía, española de padre marroquí que cada año viaja desde Madrid con sus padres y hermanos para visitar a su familia. Harán noche en el puerto de Algeciras y asegura que «nunca se ha sentido insegura» pero que su madre, que lleva décadas realizando el viaje, ha notado un incremento de la seguridad en los últimos años.

Su amiga Samira irá este año en avión hasta Tánger, ya que el viaje es mucho más corto y cómodo que el que suele realizar en autobús. «Con los años la seguridad ha evolucionado a mejor», afirma, y destaca el caso del aeropuerto de Tánger, al que sólo pueden acceder «los que tienen billetes de avión, cuando antes entraba todo el mundo, ahora no».

Mohamed ya está de vuelta. Este periodista y profesor en la Universidad de Cádiz, ciudad en la que lleva viviendo desde hace 14 años, visitó a su familia a finales de junio y, aunque el barco en el que cruzó el Estrecho iba lleno, destaca que la afluencia de personas «aumenta en julio y agosto, cuando vienen también de otros puntos de Europa, como Francia, Holanda o Bélgica». Afirma que este viaje no percibió más seguridad en los puertos, pero que desde hace años los controles se han incrementado. Pasar la maleta por el escáner en el puerto antes de coger el barco, contestar a las preguntas de los agentes o rellenar el documento marroquí para entrar en el país, son algunos de ellos.