Nace una marea blanca en Cádiz

Llamaba la atención que Cádiz no tuviera ningún movimiento vinculado a la oleada de mareas blancas que vienen denunciando el deterioro de la sanidad pública andaluza. La tradición reivindicativa de la provincia y las clamorosas carencias en infraestructuras y medios son un excelente caldo de cultivo para que colectivos ciudadanos y de profesionales se organicen para tomar las calles, pero hasta el momento se ha impuesto una paz que sólo se ha alterado por las manifestaciones de los trabajadores de las clínicas Pascual.

Sin embargo, ya existía esa inquietud entre un grupo de gaditanos que esperaban al momento adecuado y a contar con un portavoz capaz de mover una masa suficiente de personas. Esa responsabilidad la ha asumido el doctor Antonio Vergara, que sigue al frente de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública y de otras iniciativas tras su jubilación.

Él ha sido el encargado de presentar este movimiento en el que se han integrado diferentes colectivos y cuenta ya con más de 1.500 adhesiones en el perfil de Facebook en apenas quince días.

La intención es llevar a cabo acciones reivindicativas en rechazo a las políticas de privatizaciones -como los conciertos-, la amortización de las plazas, el cierre de recursos o las listas de espera. «El manifiesto está aún por consensuar, pero en líneas generales ese es nuestro pilar», ha asegurado Antonio Vergara ante los que estaban presentes, obligados a cruzar de acera durante la presentación de esta Marea Blanca Gaditana. El acto ha encontrado acomodo ante la fachada de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Cádiz después de que la dirección gerencia hubiera denegado el permiso para utilizar el salón de actos del Hospital Puerta del Mar. Por ese motivo se ha traslado la rueda de prensa al vestíbulo del centro, del que también han sido desalojados exigiendo que ni siquiera se tomaran imágenes. Se les invitaba a hacer la rueda de prensa en la acera, de apenas un metro de anchura, en plena calle.

Ha querido dejar claro el portavoz que «esta no es una plataforma profesional que reivindica aspectos profesionales, para eso ya están los sindicatos». El objetivo es denunciar el «evidente deterioro de la sanidad pública que perciben ciudadanos y trabajadores». Y hay que perseguir retos concretos para tener éxito, el primero «que no se vuelvan a cerrar camas ni quirófanos por temporadas como se pretende hacer ahora para el Carnaval», ha lamentado Antonio Vergara.

Igualmente se plantean pedir colaboración al doctor Jesús Candel 'Spiriman', que lidera las mareas en toda Andalucía desde Granada. «Si no que asista a la primera movilización que organicemos, al menos que grabe un vídeo de apoyo a nuestra plataforma», ha asegurado. Pero es aún una cuestión a decidir.

Sobre el motivo por el que aún no había nacido una marea blanca en Cádiz, Vergara tiene distintas explicaciones y la primera es «el tiempo y el trabajo que lleva crear un movimiento de este tipo» desvinculado de partidos políticos u otro tipo de organizaciones. «Granada tiene un objetivo común, que es la fusión de hospitales y medidas parecidas se están tomando en otras provincias que han generado malestar en la sociedad. En Cádiz no se ha dado una situación tan clara, pero tenemos las suficientes carencias como para defender en la calle nuestro derecho a una sanidad de calidad», ha destacado.

Igualmente ha lamentado la actitud de la gerencia del Puerta del Mar, que no sólo no ha dejado presentar esta iniciativa a los medios de comunicación en las instalaciones públicas sino que ha prohibido incluso que se realizara el primer encuentro de la plataforma. «No sé hasta qué punto está autorizado para prohibirnos a un grupo de ciudadanos que nos reunamos en el hospital», ha asegurado.

Aclaración del Hospital Puerta del Mar

A este respecto, fuentes de la dirección del centro han aclarado que «el salón de actos tiene un uso docente y formativo, con contenidos de carácter científico-técnico, y en menor medida, lúdico para sus pacientes». Han puesto ejemplos de eventos que se han celebrado en estas dependencias como la visita de los Reyes Magos o el concierto del Festival de Música Española de Cádiz. Señalan que «así ha sido trasladado a los convocantes del acto de este martes» a los que se les denegó el permiso con antelación. Y han recalcado que «también se ha hecho en otras ocasiones con actos de esta naturaleza».

Igualmente explican que «el vestíbulo del centro es zona de paso de profesionales, usuarios y pacientes y cualquier concentración de personas, más si cabe incluyendo cámaras, tiene que tener un permiso previo». El motivo es que «puede entorpecer el tránsito, causar molestias y vulnerar el derecho a la intimidad y confidencialidad de los que por allí pasan». Por eso mismo, al no tener el centro conocimiento de que se iba a celebrar esa reunión, «se invitó a los convocantes a hacerlo en el exterior».