La Mirandilla manifiesta su apoyo a familias y alumnos intoxicados por hachís

En un comunicado remitido este jueves por la dirección del colegio La Salle Mirandilla tras la intoxicación con hachís sufrida de manera accidental por tres menores del centro se manifiesta que según las informaciones de la Policía, todo indica que «la sustancia vino de fuera del colegio y no estaba en el patio». En el escrito se confiesan «consternados» con el hecho y aseguran que lo primero es «proteger la identidad de los menores y sus familias, especialmente de aquellas que se han visto implicadas. Desde el primer momento hemos estado junto a ellas y las hemos mantenido informadas de todas las actuaciones realizadas, transmitiéndoles tranquilidad y seguridad para sus hijos. Nos comprometemos a seguir ofreciendo a las familias la información oportuna si surgieran nuevos datos relevantes», afirman en el comunicado.

Además se asegura que desde que se conoció lo que había ocurrido se pusieron a disposición de las autoridades competentes, «notificando lo acontecido y ofreciendo una colaboración plena. Confiamos que el trabajo conjunto conducirá a la clarificación total de los hechos». «Lo acontecido es un hecho puntual y garantizamos que el centro ha sido, es y seguirá siendo un entorno seguro».

El escrito continúa asegurando que «La Salle Mirandilla es un centro que educa en valores humanos y cristianos, comprometidos con la realidad de su entorno. Su personal está implicado y es coherente con lo que transmite», manifiestan. Por ello entienden que su «principal preocupación son nuestros alumnos, su educación y su persona», y destacan que «lo acontecido es un hecho puntual y garantizamos que el centro ha sido, es y seguirá siendo un entorno seguro».

Por otro lado, el centro agradece «el apoyo y la confianza que, desde un primer momento, están recibiendo el equipo directivo, el claustro de profesores y el PAS de las familias del centro y del AMPA, por medio de su presidenta, así como desde la institución lasaliana. Se reconoce la labor educativa desarrollada a lo largo de toda la historia del centro en favor de los niños y jóvenes del barrio donde se ubica».

En cuanto a si el incidente ha cambiado la rutina del colegio, el comunicado descarta tal posibilidad, asegurando que el centro «continúa con su funcionamiento y buen clima habitual a favor de los alumnos, y para que este funcionamiento continúe considera importante el cuidado de las informaciones ofrecidas, desde el respeto a los derechos de los menores».

Por último el escrito incide en la apuesta por «una educación integral e integradora de las familias del barrio en el centro para transformar y mejorar la sociedad en que vivimos».