Cuestionan a Navarro ante su «incapacidad» para la venta del hotel del Estadio Carranza

La venta del módulo hotelero del Estadio Carranza no llega y la enajenación de este inmueble bajo la fórmula de adjudicación directa expira el próximo 20 de julio. Será entonces cuando el equipo de Gobierno, en el caso de que no se hayan presentado ofertas, deberá sacar un nuevo pliego para licitarlo nuevamente.

La oposición ha montado en cólera y exige responsabilidades al concejal que se comprometió a que antes del 31 de diciembre de 2016 el módulo hotelero situado en la tribuna del Estadio Carranza estaría vendido. Valorado en 9,8 millones de euros, esta cuantía se contempló en los presupuestos municipales del pasado año en el capítulo de ingresos, siendo uno de los asuntos por los que la oposición votó en contra de las cuentas municipales obligando así al equipo de Gobierno a aprobarlas en solitario en la Junta de Gobierno local.

Desde Ciudadanos, su portavoz, Juan Manuel Pérez Dorao, ha asegurado que el responsable de las negociaciones de esta venta, David Navarro, «debería de irse si llega el 20 de julio y no se ha conseguido un comprador para el hotel». Además, ha añadido que debería de ser una consultora o empresa especializada en la compra y venta de inmuebles la que se encargase de este cometido en lugar del responsable municipal de Patrimonio, «que está claro que ha demostrado su incapacidad para lograr vender este hotel».

Por su parte, el portavoz del PP, Ignacio Romaní, ha afirmado que «el término del plazo de la adjudicación directa crea un serio problema al Ayuntamiento de Cádiz porque los plazos para convocar un nuevo pliego de condiciones para la enajenación del módulo hotelero nos van a llevar a después de verano. Nadie en su sano juicio puede defender que con esos plazos los ingresos de la venta estarán en las cuentas de 2017», tal y como ha anunciado el equipo de Gobierno municipal.

Para el PP, la conclusión es que «estaremos un año más con partidas esenciales para el funcionamiento de la ciudad a cero y sin inversión alguna en ayudas sociales, en mantenimiento de la ciudad o en limpieza y conservación».

Los populares han responsabilizado además de esta situación al Grupo Municipal Socialista, al que pide que «reaccione de una vez e intente poner a trabajar a David Navarro, porque es evidente que sólo la complicidad de los socialistas gaditanos está permitiendo que este desastre económico castigue de la manera que lo está haciendo a la ciudad de Cádiz».

Romaní ha lamentado que la realidad sea la del presupuesto del «cero» tras el decreto de ajuste por el que se recortaron más de 13 millones de euros. El PP ha afirmado que «esperamos sobre todo que quién dijo eso de que en diciembre de 2016 vendería el hotel sí o sí asuma sus responsabilidades en este caos».

Un club de playa como aliciente en el pliego

Para el portavoz de Ciudadanos, Juan Manuel Pérez Dorao, el pliego para la enajenación del hotel debería de contener algún «aliciente» dada la situación en la que se encuentra el Estadio Carranza, es decir, «sin que esté a la vista ni en primera línea de playa».

Pérez Dorao asegura que ha propuesto en más de una ocasión -sin que se haya obtenido respuesta por parte del equipo de Gobierno hasta el momento- que se ofrezca al posible inversor la posibilidad de integrar un club de playa que se situaría en la playa Victoria a la altura del Estadio y que contaría con «vestuarios, duchas, servicio de bar o restaurante y otra serie de prestaciones que harían mucho más atractiva la oferta para el posible comprador».