POLÉMICA

El Ayuntamiento de Cádiz se lava las manos por la sanción a un vecino que grabó una actuación policial

El Consistorio alega ahora que han sido los propios agentes a título personal quienes han denunciado los hechos

El concejal de Personal, David Navarro, pide la dimisión del subdelegado del Gobierno por mentir y lo tacha de «talibán y hooligan de la política»

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El Ayuntamiento de Cádiz, gobernado por Podemos, ha eludido cualquier responsabilidad sobre la denuncia interpuesta por cuatro agentes de la Policía Local contra un vecino por grabar y subir a la Red la actuación que llevaron a cabo en un decomiso de venta ambulante. Los hechos tuvieron lugar el 23 de octubre del pasado año en la calle de La Rosa. Los agentes procedieron a retirar la mercancía a un parado, que vendía pescado en mitad de la calle. La actuación, no exenta de polémica ya que el vendedor era una persona sin recursos, fue grabada en vídeo por otra persona. Las imágenes se colgaron horas después en el canal de Youtube y en Facebook.

Lo más curioso del caso es que al día siguiente, el 24 de octubre, la Subdelegación de Gobierno de Cádiz recibió un escrito municipal, firmado por el Superintendente de la Policía Local, donde se daba cuenta de lo ocurrido y se elevaba, por tanto, la correspondiente denuncia acogiéndose a la ley orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, aprobada por el PP en noviembre de 2013 y más conocida como ley mordaza.

Esta ley prohíbe grabar o fotografiar a policías en la prestación de sus servicios. La normativa entró en vigor en julio de 2015 y ha sido el caballo de batalla de los partidos de izquierda, en especial de Podemos, que exigen su derogación.

La denuncia de los agentes, el respaldo que ha tenido por parte del Superintendente y el sello municipal que llevan los papeles que han llegado hasta la Subdelegación de Gobierno han servido al propio subdelegado, Javier de Torre, para advertir a la opinión pública de que ha sido el propio Consistorio quien ha impulsado la denuncia contra el vecino que filmó y subió a la Red dicha actuación y que ahora se enfrenta a una sanción de 601 euros.

El Ayuntamiento de Cádiz, a través del concejal de Hacienda y responsable de Personal, David Navarro, ha desmentido al subdelegado esta misma mañana y ha aclarado la situación. En este sentido, Navarro ha insistido en que la denuncia interpuesta contra el vecino es fruto de una decisión personal de los propios agentes, que han visto agredida su intimidad, y que nada tienen que ver con el Ayuntamiento. El edil ha desvinculado al equipo de Gobierno de este procedimiento administrativo y ha justificado la firma del Superintendente en la citada denuncia como jefe de los cuatro agentes locales. En su opinión, la Policía Local es un cuerpo jerarquizado y es el jefe quien tiene que avalar este tipo de denuncias, «aunque sean a título personal».

De esta forma, el concejal David Navarro ha mostrado su rechazo firme y el del equipo de Gobierno a la denominada ley mordaza, «que vulnera hasta siete derechos básicos». Navarro ha rechazado que el Ayuntamiento de Cádiz apoye esta norma y niega también su utilización. Ha dejado claro que el Consistorio no ha favorecido la denuncia por la que se castiga a un vecino con 601 euros por grabar a la Policía Local.

Ante esta situación, el edil de Personal ha cargado las tintas contra el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, que «ha tratado de confundir a la opinión pública con su versión». Así, ha solicitado su inmediata dimisión por «no servir a los intereses generales sino simplemente a los suyos y en especial a los de su partido, el PP».

Navarro ha calificado a De Torre de «talibán» y «hooligan» de la política, que se empeña en provocar incendios «para que la cortina de humo impida ver su incapacidad de gestión». Según Navarro, De Torre «tiene una actuación sectarea y se le llena la boca de ruido, pero solo busca distraer la atención».

Navarro insiste en que el subdelegado miente con sus afirmaciones a la hora de acusar al Ayuntamiento de utilizar la ley mordaza en beneficio propio. Para el edil, el subdelegado está en fuera de juego de manera permanente.

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