El camino de José Manuel

Muchos eligen hacer el camino de Santiago, pero José Manuel Nebreda ha optado por hacer su propio camino. Este malagueño, de 32 años, está recorriendo con un presupuesto mínimo toda la costa andaluza, de punta a punta, con una meta solidaria: ayudar a la construcción de una escuela de primara en Etiopía para 240 niños. Las obras para levantar el colegio tienen un presupuesto de 65.000 euros y esta es la cifra que se quiere alcanzar mediante las donaciones y colaboraciones solidarias que se pueden realizar en una cuenta de Manos Unidas.

El proyecto arrancó el 14 de agosto en San Juan de los Terreros (Almería) y finalizará el próximo sábado, día 5 de septembre, en Ayamonte (Huelva).

Como si fuera el Tour de Francia, pero a pie, José Manuel afronta 850 kilómetros repartidos en 21 etapas. Una media de 40 kilómetros por jornada, una maratón diaria. Y solo dos descansos: el de hoy, en Cádiz tras llegar ayer a la playa de la Victoria procedente de Caños de Meca. «De los dos días de descanso uno quise que fuera en Málaga, en mi tierra, para disfrutar de la familia. Y el otro quería que fuese en Cádiz porque estuve en unos Carnavales y tenía pendiente conocerla bien», explica Nebreda, originario de la barriada de El Palo y afincado en Madrid desde hace cinco años.

El malagueño habló ayer con este periódico en plena marcha. Su tocayo José Manuel, corredor que le acompañó durante la etapa, la número 17 del camino, ejerció de mediador. El objetivo del periodista, robarle poco aliento. El suyo, doble: por un lado que la construcción de la escuela en Etiopía llegue a buen puerto y por el otro disfrutar tanto del camino como de la meta final. «Llego a la Victoria y esa es mi nueva victoria. En Huelva, donde acaba esta aventura, ahora mismo ni pienso: no existe para mí», apura el corredor malagueño dejando claro que lo más duro está siendo «lo psicológico».

«Hace unas etapas estuve a punto de derrumbarme y no seguir, pero me levanté y seguí con más fuerza. Alterno paseos con carrera, pero más de la mitad de las etapas las suelo hacer corriendo. Hay mucha dureza, como correr por asfalto con el calor que está haciendo. Pero todo el esfuerzo tendrá su recompensa si logro al menos una aportación económica para la construcción de la escuela. Además no todo es duro, no tienen precio las zonas y la gente que estoy conociendo, una pasada», asegura José Manuel, que tiene entre manos la web www. alandarun.com para que se puedan seguir sus pasos.

«Al-andarun es la evolución progresiva y lógica de lo que representa mi vida, lo que soy y lo que quiero llegar a ser. Quiero demostrarme a mí mismo e inspirar a otras personas que todo es posible si va más allá de las palabras y se convierte en hechos tangibles. Apego y arraigo a Andalucía, turismo y running unidos, convertir los límites en orillas», explica este licenciado en solidaridad y profesional de la actividad física y la salud.

Al guerrero de las carreteras andaluzas le toca hoy descansar en Cádiz. «Hay pocos sitios mejores para hacerlo, pero estoy tan muerto que si voy a alguna parte es porque me llevarán en coche...», pensaba en voz alta Nebreda.

Huelva aún no existe, pero está ahí. Como Etiopía, que no conviene confundir con Utopía. El número de cuenta en el que se puede hacer un ingreso para colaborar con la causa de Manos Unidas es ES20 2103 0146 92 0030707347(Concepto: Etiopía).