cádiz

Las guarderías gaditanas se «asfixian» por la deuda que mantiene la Junta

Los centros conveniados con el Gobierno andaluz denuncian el retraso en los pagos y el incumplimiento de los convenios

cristina marzán
Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

«Nos sentimos indefensas. Lo único que queremos es una solución porque nos jugamos los propios centros. Y la situación es insostenible». De esta forma justificaba Maite Frade Jiménez, una de las portavoces por Cádiz de la plataforma Escuelas Infantiles Unidas, la problemática que atraviesan actualmente las guarderías conveniadas con la Junta de Andalucía.

Dicha plataforma, de la que ya forman parte todas las provincias andaluzas a falta de Córdoba y Almería, ha unido sus voces para denunciar los impagos por parte de la Junta de Andalucía, que contrae una deuda doble con estos centros; por una parte, las mensualidades, ya que según la portavoz, «hemos cobrado el 4 de agosto, el pago correspondiente a mayo, cuando lo lógico hubiera sido recibir junio.

Por lo que ya llevamos un retraso de más de 40 días», explicaba.

Por otro lado, el Gobierno autonómico debe una bonificación de mil euros por aula, según el compromiso firmado en febrero de 2013 como compensación al estancamiento del IPC. Es decir, si en Cádiz y provincia, «hay más de 100 guarderías conveniadas», con entre una y seis aulas, dependiendo de su superficie y capacidad, la deuda se eleva a más de 200.000 euros entre la capital y su provincia.

Estos centros, denominados de Educación Infantil hasta los tres años según el actual decreto, deben percibir antes de la finalización del curso escolar dicha cantidad para compensar el estancamiento del IPC desde 2009 y la falta de ajuste del precio/plaza al coste real. «Todavía no hemos cobrado nada y aunque el mes de agosto las guarderías cierren, seguimos teniendo que pagar los alquileres, las nóminas, las vacaciones, los seguros, y un largo etcétera», concretaba la educadora.

Estas escuelas infantiles privadas mantienen un convenio con la Junta de Andalucía; el mismo establece que los centros ponen el 100% de sus plazas a disposición de la Administración, no pudiendo poseer ninguna de carácter privado. Por ello, «con lo poco que terminan pagando los padres, no podemos sufragar los gastos a los que este mes hacemos frente», argumentaba la representante del colectivo gaditano.

A este respecto, otra de las denuncias de la plataforma Escuelas Infantiles Unidas es la revisión del propio convenio ya que en el caso de los centro conveniados, la Junta abona una cuantía máxima de «278 euros por niño mientras que en las escuelas públicas pagan casi el triple. Por no olvidar que a nosotros nadie nos pagan las aulas matinales mientras que a las públicas, sí», añadía.

Secuelas de la deuda

La guardería Virgen de la Paz es uno de los centros conveniados con la Junta en la capital. Con un total de 23 trabajadores y 8 aulas en el centro, la deuda actual asciende a 58.000 euros, cifra que detallaba una de las responsables de la escuela infantil, Pilar Catalán. «Estamos sin fondos y no hemos podido pagar la extra de julio ni hacer frente a otros gastos de mantenimiento», añadía.

En otro de los centros de Cádiz, la guardería Boliche, han tenido que solicitar ayuda a la Asociación Alendoy para sufragar las carencias de agosto ya que tienen otras dos aulas más, por lo que mínimo 2000 euros de demora más el retraso de las mensualidades las han puesto entre la espada y la pared. «Solo pedimos que se nos pague a tiempo porque no hemos podido hacer frente ni a las vacaciones de los trabajadores, cuando el año pasado ocurrió lo mismo», argumentaba su directora, Mónica Campos.

Desde la escuela Doña Popi, más de lo mismo, ya que sus 8 trabajadores y sus tres aulas siguen sin cobrar. «La situación es insostenible», lamentaba Sonia Cabello, directora de la misma. Por su parte, Purificación Mendiguchía, directora de la guardería El Patio, no tenía muchas más palabras ya que con 10 empleados y seis aulas completas, para qué hacer números si el dinero que se les debe es aún mayor que en el anterior caso. Por último, desde la guardería Parvulitos Villa Esther poco más iban a añadir, con otras dos aulas completas de niños, otros 2000 euros por aula y 5 trabajadores gracias a los cuales el trabajo sigue adelante cada año. «Estamos igual de ahogadas y asfixiadas que las demás. Necesitamos que nos paguen», reconocía la directora, Alicia Reyes.

La plataforma Escuelas Infantiles Unidas ha asegurado «haber intentado negociar» con la Junta aunque sí ha señalado «no haber tenido ninguna respuesta» en todo el año. El 1 de septiembre está a la vuelta de la esquina así que solo cabe esperar una respuesta por parte de la Administración.

Ver los comentarios