domingo de resurrección

Dos heridos graves y varios leves en el Toro del Aleluya de Arcos

Un joven ha sufrido una herida por asta de toro en el abdomen y ha sido trasladado al Hospital de Jerez tras ser intervenido de urgencia en el Hospital de Campaña de la Cruz Roja en Arcos

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Un herido grave en el primer encierro y otro en el segundo ha sido el balance del Toro del Aleluya de Arcos, con el que el municipio celebra el Domingo de Resurrección. La localidad vivió un festejo pasado por agua y las circunstancias dificultaron las carreras de los jóvenes, al encontrarse el firme muy mojado. En total, el dispositivo de la Cruz Roja tuvo que atender a una decena de heridos y se llevaron a cabo cuatro traslados hospitalarios.

El caso más grave fue el de una cogida que se produjo en la calle Gomeles, a la altura de la entrada en calle Alta, donde un hombre que se refugiaba junto a los palos fue alcanzado por el primero de los toros, Colibrí, a las 12.45 horas. Tras darle un par de golpes y tirarlo al suelo, el toro lo lanzó por el aire y eso le provocó un fuerte golpe en la cabeza. No obstante, la herida más importante que sufrió este hombre, de 45 años, fue una cornada en el abdomen que obligó a intervenirlo de urgencia para estabilizarlo en el Hospital de Campaña de Cruz Roja y a derivarlo hasta el hospital de Jerez, donde tuvo que ser operado de urgencia.

Un hombre de unos 35 años fue el herido más grave que produjo el segundo de los toros, Fragata. El incidente también se produjo en la calle Gomeles, a eso de las 15.10 horas, pero no sufrió ninguna cornada. El toro lo golpeó, dejándolo inconsciente, y lo lanzó al aire, produciéndose un fuerte golpe en la cabeza al caer, originándole mucha sangre en la cabeza. Todo se produjo después de intentar recortar al toro y resbalar a su altura. Este herido fue trasladado a Villamartín. El tercer traslado fue el de una joven, de 25 años, que se aquejaba de dolores al sufrir una caída desde el vallado de seguridad. El cuarto no tuvo que ver con el encierro en sí, ya que se produjo por un ataque epiléptico.