JEREZ

Cinco causas abiertas acorralan a Pacheco

El exalcalde de Jerez, condenado a cuatro años y medio de cárcel por enchufismo, acumula otros cuatro procesos judiciales que le convierten en el político más perseguido por la Justicia en la provincia

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Pedro Pacheco –Jerez de la Frontera, 1949– es una de las figuras políticas más conocidas fuera de las fronteras gaditanas. Su frase, aquella que le costó su primer reproche judicial, forma parte ya del acervo popular. Pocos serán los que no la han pronunciado alguna vez, aunque sea en silencio, como respuesta a una decisión judicial incomprensible. No es su único ‘mérito’, también fue uno de los alcaldes que más tiempo ha pasado sujetando el bastón de mando de forma ininterrumpida en una Casa Consistorial tras la dictadura. Dos décadas de gobierno en solitario que fundieron al exlíder andalucista con la ciudad del vino como las dos caras de la misma moneda: Pacheco de Jerez, el Jerez de Pacheco. Un patrimonio en el imaginario de la sociedad que ya se resquebraja a través de sentencias y acusaciones que cuestionan su gestión política, la herencia que ha dejado a su pueblo.

En estos momentos, el exalcalde tiene abiertos cinco frentes judiciales en los que se juega más de diez años de prisión; unas penas que pueden duplicarse cuando se conozcan las peticiones formales que solicita la Fiscalía en, al menos, otros dos asuntos en los que ya ha concluido la instrucción judicial. Se ha convertido en una ‘rara avis’ dentro de la política provincial, ya que no hay ningún cargo o excargo público en esa situación tan extrema desde el punto de vista jurídico y penitenciario. Aunque hay quien le gana en número de procedimientos y de condenas impuestas. Se trata del exalcalde de El Puerto, Hernán Díaz (Independientes Portuenses). Pero entre ambos media una gran diferencia. Al primero lo han sentenciado ya a cuatro años y medio de cárcel; la Fiscalía Anticorrupción le pide otros siete años por la venta de la estación de autobuses y aún falta por conocer cuáles serán las acusaciones que formule el Ministerio Público en otros dos asuntos en los que la instrucción ha terminado. En cambio,

do en cuatro ocasiones, pero las penas impuestas hasta la fecha son de inhabilitación para cargo público. Por tanto, Pacheco se erige en el político de la provincia en la situación judicial más grave. Y se produce en un momento difícil en la política debido a los numerosos casos de corrupción que salpican el país y con los índices de confianza de los ciudadanos en sus responsables públicos por los suelos. En la vecina Málaga, exmunícipes como Julián Muñoz liderarían esta hipotética clasificación de cargos públicos más perseguidos por la Justicia. Allí, sin embargo, la suma de penas, en el caso del exregidor marbellí, supera el medio centenar.

La primera, por enchufismo

Jurídicamente la situación de Pacheco es provisional ya que aún no ha recibido una condena en firme, pero el panorama que tiene ante sí es complicado. A día de hoy, por el ‘caso asesores’, tiene una condena de cuatro años y medio de prisión impuesta por la Audiencia Provincial. Su defensa la recurrió ante el Supremo. También lo hizo el fiscal que pidió que se estimara uno de los delitos de los que había salido absuelto. Se enfrenta así a que en la segunda instancia, esa pena de cárcel sea aún más grave. De ser así, la jugada procesal es previsible, solicitar el indulto; pero la existencia de más causas judiciales abiertas dificultan este camino.

Su primer juicio lo sentó en el banquillo por enchufar a amigos y compañeros de partido en sociedades municipales. La denuncia partió de su otrora socia de Gobierno, Pilar Sánchez, quien puso en manos de la Fiscalía numerosa documentación sobre la gestión de Pacheco como responsable de la cartera de Urbanismo; un área que nunca abandonó aunque cediera el bastón de gobierno. Ese departamento es clave en todos los ayuntamientos donde se han destapado casos de corrupción porque es el suelo el vehículo habitual para el negocio ilícito: recalificaciones, aprobación de licencias que contravienen la ley, cobro de comisiones a cambio de parcelas...

Los cinco frentes judiciales que tiene abiertos Pacheco están relacionados con su gestión en el Ayuntamiento tras perder la mayoría absoluta en 2003. La Justicia no ha revisado ninguno de sus acuerdos cuando controlaba todos los departamentos municipales sin que ninguna formación política pudiera hacele sombra. La denuncia que formuló Pilar Sánchez en 2008 ha sido su tumba política porque tras la condena por el ‘caso asesores’ no ha podido mantener, pese a intentarlo, su acta de concejal. También puede ser el principio de un camino que le lleve a la cárcel.

El pelotazo

Pilar Sánchez y Anticorrupción no han sido los únicos que tiraron de los primeros hilos. En la reciente acusación que plantea la Fiscalía por la venta de la estación de autobuses, por la que se juega una pena de siete años de cárcel, el exlíder andalucista ha acabado procesado por una inspección de Hacienda. El fisco detectó irregularidades en la sociedad que adquirió los terrenos y a partir de ahí se destapó un presunto pelotazo urbanístico que será juzgado en los próximos meses. Las arcas públicas aparecen, de nuevo, como víctimas del desaguisado porque dejaron de ingresar casi dos millones de euros en una operación urbanística de la que sí sacaron presuntamente rédito económico dos empresarios amigos de Pacheco: José Luis López Fernández, más conocido como El Turronero y uno de los condenados en la «operación Karlos» y su socio, Francisco Chaves López.

Tirar de la manta

En los próximos días se espera conocer la tercera acusación que va a plantear la Fiscalía contra el exregidor. Se trata de las polémicas obras de la Casa del Rocío de la Hermandad de Jerez. Un asunto que nació en el trancurso de la investigación por las adjudicaciones de obras a una constructora que quebró en 2007, Jerecom. Su dueño, José Grimaldi, aseguró ante el juez cuando tuvo que declarar por primera vez que «llevaba años esperando» ese momento. Aseguró que el Ayuntamiento y la extinta Gerencia de Urbanismo acordaron con la constructora hacer un «regalo» de 600.000 euros a la Hermandad del Rocío a través de mejoras en la casa hermandad en la aldea almonteña; unas obras para las que había pedido ayuda municipal su hermano mayor. Para justificar ese importe, se emitieron facturas falsas con varias empresas, entre ellas Jerecom. Así lo declaró el dueño de la constructora, incriminándose en el procedimiento.

La instrucción de este asunto ha concluido con un auto de procesamiento del juez, acusando a Pacheco y once personas más por delitos como la prevaricación o el fraude a la Administración.

Vecinos que se revuelven

Otro de los asuntos judiciales, cuya instrucción también ha concluido, es el ‘caso Huertos del ocio’. El juzgado nº 2 de Jerez entiende que el exalcalde debe ser juzgado por un delito de prevaricación en otra polémica operación urbanística. El Ayuntamiento jerezano decidió en 2004 desalojar a los arrendatarios de unas parcelas ubicadas en la zona de San José Obrero y permutar los terrenos con la empresa Xera Promociones, que levantó en el lugar varias decenas de viviendas unifamiliares. Los vecinos denunciaron que esos terrenos sólo podían ser explotados con una utilidad pública, llevando al juzgado al andalucista que desde 1979 hasta 2003 gobernó con plenos poderes en la quinta ciudad de Andalucía, que años después, con Pacheco fuera del Gobierno tuvo que pedir auxilio financiero por su nivel insostenible de endeudamiento.