La presión vecinal logra que el bar de Santa María del Mar se haga bajo la plaza

El quiosco-restaurante de Santa María del Mar irá bajo la plaza, aunque tendrá acceso directo a la parte de arriba mediante una escalera exterior. La alcaldesa dio a conocer ayer el nuevo diseño, alternativo al inicial que fue desechado tras las protestas de un grupo de ciudadanos y la recogida de 4.000 firmas.

El establecimiento hostelero se ubicará en unos locales habilitados justo debajo de la plaza, junto a los servicios municipales. El proyecto conllevará la remodelación de la plaza.

En primer lugar, se elevará el nivel del pavimento hasta igualarlo con las aceras, con el fin de eliminar barreras arquitectónicas. Se mantendrán la estructura de la estrella, que por cierto ha dado nombre a la plataforma ciudadana que se oponía al quiosco. Se colocarán juegos infantiles y mejorará la iluminación y además se cambiará el cerramiento de la plaza. En lugar de los bloques opacos, habrá una barandilla acristalada. «Así se podrá ver el mar desde los bancos de la plaza, aunque ahora muchos digan que sí se ve tal y como está», detalló ayer la alcaldesa. La cuesta para acceder a la playa también sufrirá reformas, con el fin de que sea accesible a las personas de movilidad reducida.

El quiosco se instalará bajo la plaza, en el local preconstruido, y desde allí, con unas escaleras, se podrá subir a la plaza, donde el empresario «podrá instalar mesas durante el verano». «Queda eliminado el quiosco de arriba», reiteró la edil para tratar de zanjar la polémica. Lo que está claro es que habrá que iniciar un nuevo procedimiento administrativo. «Las condiciones han cambiado y habrá que ver si el concesionario está de acuerdo», puntualizó Martínez.

El concesionario actual, Pablo Grosso, aseguró ayer a LA VOZ que aún tiene que conocer el proyecto, pero en principio se muestra de acuerdo con el nuevo planteamiento «si no se pierden metros y le dan fácil acceso desde el paseo marítimo».

Grosso manifestó que está esperando el planteamiento del equipo municipal «porque todavía no he visto el local por dentro, si tiene una o dos plantas y qué es lo que abarca». Una vez que lo estudie, decidirá «si puede plantear alguna sugerencia», puntualizó. Respecto a las protestas, la alcaldesa señaló que «no tenía ni idea de la convocatoria», aunque a renglón seguido añadió que «tampoco nos extraña porque colgaron unos enormes cartelones de colores abrazando las palmeras, que por cierto no sé qué idea tienen esas personas de la protección del medio ambiente».

«Estamos satisfechos con esta propuesta de los técnicos, porque se ajusta a la petición de los vecinos pero no se renuncia a la ubicación de servicios que creemos necesarios», acotó Martínez. No obstante, la regidora aprovechó la ocasión para comentar que «algunos no quieren creernos, pero es porque tienen otros intereses partidistas».

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