SIN GÉNERO. Encontrar algunos productos frescos ayer en los supermercados fue una tarea difícil.
Jerez

Remite la psicosis, suben los precios

El pánico al desabastecimiento desatado el lunes se ha aplacado a mitad de semana, pero el problema se agrava porque los productos básicos empiezan a escasear y a encarecerse

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La tercera jornada de paros del sector del transporte (algunas más si se tiene en cuenta que la Plataforma en Defensa del Transporte inició sus movilizaciones el pasado viernes) volvió a estar ayer marcada por la escasez de combustible en las estaciones de servicio de toda la provincia y la falta de abastecimiento en las tiendas y grandes superficies, donde los lineales vacíos de productos frescos ya son una estampa habitual. No todo ha sido culpa de la falta de suministros, la psicosis consumista de los ciudadanos también ha favorecido que los stocks se hayan visto reducidos.

Pero parece que la «locura» se ha parado. Ayer en los comercios la avalancha de clientes se reducía y las compras cayeron en picado en todos los comercios. Claro que para entonces ya había empezado a hacer efecto otra consecuencia de la falta de abastecimiento: la subida del precio de los pocos productos que aún se pueden adquirir.

JEREZ

Sin gasolina, pero con verdura fresca

La mañana trajo ayer buenas noticias para Mercajerez, el centro de abastecimiento para mayoristas de la ciudad, que pasó de la alarma del día anterior a una relativa tranquilidad. El gerente de las instalaciones, Ángel Salazar, explicaba que «ha habido abastecimiento porque han podido llegar camiones pequeños y furgonetas, ya que los propios agricultores se han atrevido a hacernos llegar el producto». Según Salazar, la actividad en Mercajerez pudo estar ayer al 70% de un día habitual, y «no ha habido más compradores porque algunos no se han acercado al no saber cómo iban a reaccionar los proveedores». A este paso, «y si la presión de los huelguistas no lo impide», el mercado mayorista no debe tener problemas hasta mañana.

El funcionamiento de Mercajerez se tradujo en una buena mañana de compras en el Mercado de Abastos, donde la mayoría de los puestos de fruta y verdura y los de carne pudieron atender a sus clientes con normalidad. Otra cara es la que vivieron los pescaderos de la carpa ubicada en Doña Blanca, a los que se les une la huelga del transporte y la de los pescadores. Ayer se notó, y apenas una decena de puestos estuvieron abiertos, y con una visible escasez de género.

La peor parte de la ausencia de transporte se la llevaron ayer los supermercados de las barriadas, donde encontrar algo de carne, pan, fruta o lácteos se convirtió en una misión imposible. «Ya ni congelados o bebidas quedaban hoy (por ayer)», explicaba ayer una clienta, Paqui Aguilar, en uno de ellos mientras a su alrededor se sucedían las compras de lo que poco con lo que se podía llenar el carro. A su lado, una clienta de edad avanzada criticaba la exagerada reacción de la población y murmuraba que «esto sólo lo había vivido yo en el 36».

Tampoco fue fácil llenar el depósito de gasolina ayer en Jerez, ya que al filo del mediodía en la mitad de la veintena de estaciones de servicio de la ciudad no había producto, como informó el presidente de la patronal provincial, Ángel Zamorano. Por la tarde estaba previsto que unas cinco cisternas llegaran a la localidad para surtir a las gasolineras, en particular de diésel, el producto más demandado y que antes se agotó. Zamorano confió en que la llegada a cuentagotas de los camiones y «el descenso del consumo, porque la psicosis ya se ha rebajado», haga posible que en las próximas jornadas sea posible repostar en la ciudad.

Muy golpeado están dejando estos paros al sector agrícola ganadero de la Campiña. Ayer, sin ir más lejos, una explotación ganadera de la barriada rural de El Torno, decidió regalar los alrededor de 1.000 litros de leche que almacenaba antes de optar por tirarlos para poder seguir ordeñando a las vacas.

COSTA NOROESTE

Preocupación en el sector agrícola

Las localidades de la Costa Noroeste también se han resentido estos días por la huelga, y en ciudades como Chipiona hasta la noche del martes o la mañana de ayer no se pudo echar gasolina. Una vez llegaron las cisternas, llegaron las colas de usuarios que tuvieron a esperar hasta media hora en algunos casos para repostar. En los supermercados, la escasez fue la nota dominante.

En esta zona de la provincia, con gran importancia del sector agrícola, los productores de las cooperativas hortícolas ven aumentar su preocupación por la imposibilidad de trasladar productos tan perecederos como el tomate, la patata o la zanahoria, que están en plena campaña de recolección. El sector de la flor cortada también puede acumular pérdidas, porque aunque no se encuentra en uno de sus periodos de mayores ventas, hay una parte de producción a la que dar salida y que está inmovilizada.

CÁDIZ

Tranquilidad hostelera, y escasez de pescado

El pescado fue lo que más escaseó ayer en la plaza central de abasto de Cádiz. Más de media docena de pescaderías especializadas en el producto fresco amanecieron cerradas y el resto sólo pudo ofrecer pescado congelado. Las fruterías y carnicerías parecían repletas, aunque sus dueños admiten problemas para conseguir mercancías. En consecuencia, algunos precios se han duplicado en dos días. «Las lechugas ya se venden a dos euros», explicaba una tendera. «Y los tomates valen 60 céntimos más».

Desde la Asociación provincial de Hosteleros (Horeca) se aseguraba que el suministro en hoteles, restaurantes y cafeterías está garantizado «al menos hasta el fin de semana», según su presidente, Antonio de María Ceballos.

EL PUERTO

El Hospital hizo acopio la semana pasada

La huelga de transportistas comienza a hacer mella en El Puerto. Las estanterías de los productos perecederos en las tiendas están prácticamente vacías y los consumidores van de supermercados en supermercado buscando algo de fruta y verduras.

Pero la huelga afecta a todos los sectores. El Hospital Santa María del Puerto también ha tenido que hacerle frente. Aun así, y al tratarse de un lugar de máxima atención, la semana pasada hicieron los pedidos necesarios para abastecer a la cocina de todos los productos necesarios mientras perdure la huelga.

CHICLANA

La Feria se convierte en víctima colateral

Una circunstancia que sí hace especial en Chiclana la actual protesta de los sectores del transporte es que en la ciudad coincide el paro con la celebración de la Feria de San Antonio 2008. De momento los caseteros han sido previsores, y en días pasados se han hecho con provisiones de alimentos y comida por si el paro persiste. No se descarta algún episodio de piquetes, sobre todo en la jornada de hoy, y en relación a los camiones y furgonetas que deben acceder al ferial a suministrar productos como el hielo, los refrescos e incluso el butano.

Sin embargo, el montaje del recinto ferial ha concluido sin problemas y la feria comenzó anoche sin rastro de la huelga.

SAN FERNANDO

El Mercado Central sufre los efectos

Incertidumbre y previsión. Los isleños se suman al resto de gaditanos en cuanto a compras adelantadas y sufren por igual el desabastecimiento en productos perecederos y en las gasolineras. Un buen foco para seguir la evolución de la crisis es el Mercado Central, donde su presidente calcula que ya están al 80% de capacidad y que no hay reservas para reponer. La semana que viene, como en el resto de ciudades de la Bahía, podrían sucederse problemas serios de desabastecimiento.