EL CUARTO ENTRENADOR. Antonio Muñoz atendió a los medios tras la reunión en Bahía Sur para comunicar el fichaje de Julián Rubio. / ANTONIO VÁZQUEZ
Cádiz C.F.

Antonio Muñoz deja en manos de Julián Rubio la salvación del Cádiz

El manchego, «idóneo en estas situaciones» según el presidente, dirigirá al equipo hasta final de campaña sin ningún compromiso para continuar Procopio es cesado porque «sería de irresponsables cruzarnos de brazos»

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Julián Rubio. Ése es el hombre. El entrenador encargado de dejar al Cádiz en Segunda División, de salvar los muebles en una temporada horrorosa. Antonio Muñoz deja en su mano la permanencia del equipo amarillo y el futuro inmediato de esta entidad centenaria.

El técnico manchego llegó a la Tacita en la madrugada de ayer y hoy dirigirá su primer entrenamiento a las 10,30 horas en El Rosal. Se mantendrá en el banquillo hasta final de temporada, las tres jornadas que restan. Para la próxima campaña, «hay opciones de que continúe, pero ningún compromiso firmado», señala el presidente cadista.

Este es uno de los motivos por los que se ha elegido al ex futbolista de Sevilla y Barcelona, entre otros. Rubio Ya estuvo muy cerca hace siete jornadas, cuando se destituyó a Calderón, pues siempre es el que más ilusión ha mostrado por entrenar al conjunto gaditano. Para Muñoz, «es el entrenador idóneo en este tipo de situaciones, según la información aportada por nuestra secretaría técnica y los informes de otros profesionales del mundo del fútbol». Reconoce que «no es fácil para nadie correr ese riesgo. Sólo el valiente, y quien tiene confianza en esta plantilla, afronta este reto. En situaciones como está, es una persona muy efectiva. Conoce perfectamente al Cádiz (veranea en Zahara y sigue de cerca a los amarillos) y es ideal para cambiar la dinámica».

Confianza plena

Está claro que se busca un revulsivo, más allá del nombre o la valía del entrenador. «A ver si este cambio surte el mismo efecto que con el de Raúl y ganamos los dos partidos que hacen falta. Que todo quede en una pesadilla, porque tengo la confianza de que salvaremos la categoría. Una permanencia que sabrá a ascenso».

Julián Rubio dio el ok por la mañana. En esos momentos ya se le había comunicado la decisión a Raúl Procopio. Nadie quiso hacer sangre con la figura del gaditano, quizás el menor responsable del desastre. El máximo accionista se dedicó a mirar los números. «Las situaciones surgen, no se eligen, y la dinámica del equipo en estas cinco últimas jornadas no hace falta ni comentarla. A mí es al que más me duele, pero sería una irresponsabilidad quedarnos cruzados de brazos. Algo tenemos que hacer».

Confiesa que ahora mismo «no podemos hablar de proyecto de futuro, sino del presente. Sería incoherente. No damos palos de ciego, sino que hacemos lo que creemos más oportuno en cada momento».

Reunión en Bahía Sur

Antonio Muñoz estuvo respaldado por todo el Consejo de Administración y el director deportivo, José Manuel Barla. La reunión donde se decidió el futuro del Cádiz se celebró en el hotel Bahía Sur de San Fernando y comenzó pasadas las siete de la tarde. Se eligió este enclave para evitar altercados y por motivos de seguridad, ya que varios aficionados cadistas habían manifestado su intención de acudir al estadio para mostrar su disconformidad con la situación.

El presidente espera que no se repitan situaciones como la del domingo hasta que se finiquite la temporada. Lanzó un nuevo y contundente mensaje de unión de todo el cadismo. «Hay que recuperar el espíritu que lograron aquellos milagros en Primera, donde todos estábamos unidos. El descenso perjudica a todos».

Y por ello protege a sus futbolistas, pese a que es consciente de que el problema no está en el banquillo sino en el vestuario. «»No diré públicamente lo que diremos a los jugadores, pero cuantas menos críticas, mejor. Meterse conmigo, asumo la responsabilidad, pero los futbolistas son los que tienen que sacar los partido adelante y no quiero que se cree un mal ambiente. Debemos estar a su lado porque a muchos les pesa la presión, cada uno tiene una mentalidad diferente». Apunta que «el entrenador no entenderá que no estemos todos unidos en este momento tan difícil».

Antonio Muñoz exige la autocrítica a todos, «porque de este año vamos a aprender muchísimo, y yo más que nadie».

El mandatario cordobés hace cuentas y ya reconoce que «nos lo jugamos todo en los dos últimos partidos, por eso la prensa debe concienciar a la afición de la importancia del partido ante el Sevilla Atlético. Ojalá ganemos en Málaga, iremos al máximo, pero sabemos que será complicado».

jaguilera@lavozdigital.es