En busca de responsabilidades

Los Ayuntamientos de la Línea de la Concepción y de Algeciras anunciaron que se plantean emprender acciones jurídicas contra las autoridades de Gibraltar por «las responsabilidades que puedan tener» en el hundimiento del New Flame, el chatarrero que lleva semihundido desde agosto en aguas de la Bahía algecireña.

El alcalde de La Línea, Juan Carlos Juárez (PP), señaló que lo ocurrido es «un desastre mayúsculo» y criticó que Gibraltar «primero haya dicho que lo iba a reflotar, luego que lo iba a partir, para que, al final, haya ocurrido lo que sabíamos y se haya demostrado su incapacidad». Tampoco olvidó Juárez que el Reino Unido «no ha dicho nada en todo este tiempo» y criticó que la actitud de las autoridades españolas también ha sido «lamentable».

Hoy estudiarán «las responsabilidades jurídicas que pueda tener el ministro principal, Peter Caruana, y por supuesto nos pondremos a trabajar para conocer este apartado. En principio sólo vamos a mirar a Gibraltar», aunque añadió que «apoyaremos cualquier iniciativa de los ecologistas u otros grupos, no por ir contra el Gobierno español, sino por exigir las responsabilidades que puedan haber ocurrido en esta crisis».

Desde Algeciras, el alcalde Tomás Herrera (PSOE), señaló que su Administración «ya está trabajando coordinadamente con el dispositivo desplegado por Fomento y Costas y manifestó que a las 15.00 horas empezaron las labores de limpieza en Getares, La Concha y Rinconcillo». El edil aseguró que los restos que han aparecido son «más abundantes en la playa de la Concha» y anunció, como su homólogo linense, que «mañana mismo -por hoy- pondré el tema a disposición de la asesoría jurídica del Ayuntamiento para reclamar judicialmente todos los daños que se están ocasionando».

La defensa de la Roca

El gobierno de Gibraltar contradijo ayer la versión ofrecida por la Junta de Andalucía sobre las manchas de hidrocarburos que están llegando a la costa de Algeciras y negó que se hayan producido vertidos. En un comunicado, el Gobierno de Peter Caruana ofreció su versión de lo ocurrido con el hundimiento del buque y señala que «debido a las condiciones meteorológicas adversas que se han producido durante el fin de semana, el barco ha perdido flotabilidad». «A consecuencia de esto, --prosiguió-- la sección de la proa del barco quedó en posición vertical y desde la superficie sólo se puede apreciar una parte del mástil y la parte superior de la chimenea».

El portavoz del grupo ecologista en el Campo de Gibraltar Agaden, Juan Antonio Carrasco, lamentó el hundimiento del New Flame y anunció que pedirán ayuda a Greenpeace para realizar un movimiento conjunto, al tiempo que anunció que estudian denunciar ante la Unión Europea por responsabilidades en lo ocurrido, «tanto al gobierno de Gibraltar como al de España». Carrasco recordó que «este es el séptimo vertido que provoca el New Flame desde que se produjo el incidente en el mes de agosto». Es por ello, que los ecologistas pedirán «una investigación sobre las irregularidades y mentiras que se han producido desde que llegó el barco en agosto».