FLOTA. Las líneas de autobuses urbanos de Jerez cuenta enla actualidad con medio centenar de vehículos como el que aparece en la imagen. / TAMARA SÁNCHEZ
Jerez

La deuda del Ayuntamiento con la empresa Cojetusa impide su venta

FCC, propietaria de la concesión, se ha desprendido de todas sus divisiones de transporte urbano menos la de Jerez Los compradores de la matriz CTSA no querían hacerse cargo de este problema

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El pasado mes de noviembre se formalizó una importante operación de compra-venta por la que la constructora FCC y la compañía francesa Veolia vendieron la Corporación Española de Transportes (CTSA), empresa matriz de Cojetusa, concesionaria del servicio de transporte público en Jerez, a la firma británica Doughty Hanson.

Con esta transacción, la empresa controlada por Esther Koplowitz y su socia francesa -cada una con una participación del 50% en CTSA- tenían la intención de deshacerse de todos sus activos en el sector del transporte de viajeros por carretera, ya que su interés por esta vía de negocio tiene los días contados.

Sin embargo, finalmente no pudieron cumplir su objetivo, ya que en la transacción que se llevó a cabo estaban incluidas todas las concesiones de servicios urbanos que gestiona CTSA menos una, la de Jerez, que no pudo entrar en la operación debido a la abultada deuda que mantiene el Ayuntamiento de la localidad con la Corporación Jerezana de Transporte Urbana y que la hacía poco atractiva para los compradores.

Así, según han confirmado a LA VOZ fuentes del sector, los antiguos propietarios de CTSA no tuvieron ningún problema en vender las trece concesiones que gestionaba en ciudades como la vecina Sanlúcar, Mataró, Terrassa, Ávila, Talavera de la Reina, Marbella, Estepona, Torremolinos y Vila Real (Portugal), así como la la línea interurbana entre Madrid y Almería. Pero no ocurrió lo mismo con la empresa Cojetusa, que los británicos quisieron dejar fuera de la operación global. Tampoco entró en ella La Montañesa, ya que esta compañía es propiedad únicamente de Veolia.

De este modo, la venta final se hizo por un importe de 90 millones de euros, aunque en un principio, cuando Cojetusa también entraba dentro del lote que compraría Doughty Hanson, el montante global se elevaba a más de 100 millones de euros.

Según las fuentes consultadas, la razón principal que motivó el cambio de opinión de la firma británica y que obligó a FCC y sus socios franceses a mantener esta concesión fue que los primeros no querían hacerse cargo de una empresa que arrastraba una abultada deuda que en mayo del pasado año 2007 el mismo Ayuntamiento de Jerez cifraba en más de 10 millones de euros -después de que en esa fecha hubieran podido liquidar el otro 50% restante hasta los 23 millones iniciales gracias al Plan de Refinanciación-.

Sin embargo, según los datos que la antigua directiva de Cojetusa expuso al comité de empresa antes de la venta, desde entonces esta cantidad podría haber aumentado, ya que los anteriores responsables aseguraron que pese al pago de esa parte importante de la deuda, el Consistorio no estaba abonando las cantidades correspondientes durante un buen número de meses.

En este punto, desde el comité de empresa no quisieron hacer más hincapié en ese tema, aunque sí recordaron que «la deuda que sigue existiendo influye en cuestiones tan básicas como la renovación de la flota o la mejora de cuestiones como los asientos de los conductores, muchos de los cuales están defectuosos». No hay que olvidar que fue en octubre de 2006 cuando se incorporaron los últimos 15 vehículos nuevos a la flota de Jerez, que está formada por media centena de autocares.

En cuanto a la relación con sus propietarios de FCC y Veolia, el comité de empresa informó de que desde el momento de la venta «hemos tenido algunos problemas en los cobros, aunque las relaciones con la nueva dirección general en Jerez son buenas». Según informaron, el antiguo gerente de esta concesión cuando Cojetusa era aún propiedad de CTSA, Migual Ángel Gimeno -que sigue en esa empresa-, ha sido sustituido por Julio de Marco.

ppacheco@lavozdigital.es