Tres formas de hacer de internet tu trabajo

Hay dos maneras de enfrentarse al desasosiego, a esa angustia que produce el no tener trabajo: quedarse quieto, desilusionarse y pensar que con inscribirse en ofertas basta, y, otra, ser tu mismo el que ayude a provocar el cambio. Convertirte en el protagonista de tu oportunidad, no esperar que te la den otros sino ir a por lo que crees.

En un país donde el paro juvenil roza el 50 por ciento, el desánimo es lo habitual y comprensible entre aquellos que emprenden una vida profesional rodeados de desempleo. Pero, hay quienes han remontado y han sabido utilizar lo que tenían más cerca como el perfecto aliado. Un móvil, una tablet, un ordenador... todos conectados a lo mismo, internet.

Ahí estaba el camino. Lo tuvieron claro. Tenían que formar parte de la nueva era, estar dentro, porque justo ahí podían empezar el camino.

José María de la Cuadra tiene 31 años. Había estudiado Publicidad y Relaciones Públicas en Madrid. Recién licenciado tuvo la oportunidad de empezar a trabajar en González Byass. Eso sí, de prácticas. Entonces, llegó una gran idea: la especialización.

Comenzó un Master de la UCA en Gestión estratégica e innovación en Comunicación. «Todo me llevaba a lo mismo, todo mi mundo se relacionaba con el entorno digital». Por eso siguió la vereda e hizo otro master, esta vez de marketing on line y redes sociales. Entonces , y gracias al puesto que le dio en su empresa uno de los profesores, se acercó a este sector de una forma más profesional. SEO, consultoría digital, marketing... una buena escuela para seguir adelante.

Tras su paso por la agencia, ahora este jerezano es coordinador digital de World Vision, la ONG de apadrinamiento más importante del mundo. «Me sigo formando. No puedes parar nunca. Siempre hay nuevas herramientas y tienes que estar actualizándote. Creo que en internet hay que especializarse, elegir un campo y no intentar ir a todo porque es imposible». Para José María, en Cádiz el problema se debe a que las empresas locales son «muy reticentes a digitalizarse. Lo ven como algo que no va con ellos sino sólo con las grandes, y eso no es así. No saben que tienen en su mano toda la información que necesitan para crecer».

Carisma digital

Carmen Verdugo no es Carmen siempre. Para sus miles de seguidores es MakeupGades. Carmen es la chica gaditana que de pequeña le encantaba dibujar y MakeupGades la 'youtuber' de fama nacional que con sus vídeos dedicados al mundo del maquillaje y la belleza ha alcanzado el éxito. Más de 68.000 personas están suscritas actualmente a su canal, sus vídeos tienen una media de 8.000 visionados, (aunque algunos han superado el medio millón), acumula 11.000 seguidores en Twitter y más de 23.000 en Instagram. 'Carisma' digital parece que no le falta.

«De pequeña ni me maquillaba. Estudié Derecho pero pronto me dí cuenta que no era lo mío. Mi amor por el dibujo me llevó a investigar y poco a poco me fui metiendo en este mundo». Su interés por internet le llevó a hacer de su hobbie una profesión. Maquillaje, diseñadora de moda, estética decorativa, caracterización... «No he parado».

Sus vídeos sobre maquillajes inspirados en actrices y famosas son los más reclamados y vistos. Carmen trabaja ahora en un salón de belleza de Cádiz y también por encargos. «Mi jefa me conoció gracias al canal. Internet te abre muchas puertas. La gente me escribe correos para pedirme que les maquille y también me llaman para acudir a eventos». Además, marcas y tiendas on line le piden colaboración para promocionar sus productos, una tendencia cada vez más en alza entre bloggers e instagramers.

Patti Santamaría lo sabe bien. También es gaditana. Iba para periodista, pero, finalmente, al no poderse trasladar a estudiar a Sevilla optó por hacer Filología Hispánica. «Siempre me había gustado escribir», cuenta. Pero lo de ser profesora tampoco le convencía. Cuando sus amigas se marcharon a hacer cada una su carrera decidieron crear un blog de moda llamado shoesandbasics para, a través de él, «estar de alguna manera unidas».

«Fue hace cuatro años. Al principio me lo tomé como un hobbie... jamás pensé que iba a convertirse en mi trabajo». Y así, lo que empezó casi de manera casual tornó a profesión. «Empezaron a llamarme marcas y vi que tenía futuro. No sabía entonces nada. Tenía una cámara digital y poco más». Ahora cuenta con más de dos mil visitas diarias de media en su blog, más de 24.000 seguidores en Instagram, más de tres mil suscriptores a su canal de Youtube, y su pareja y otra colaboradora trabajan también en el proyecto.

«Te paras a pensar y la mayoría de mis compañeras de facultad están en el paro. Me tengo que sentir una afortunada», afirma. Y es que Patti ha trabajado ya para infinidad de marcas: Asos, Pepsi, Ray-ban, Vans..., entre otras. «Buscan chicas que se adapten a su estilo». Además en el blog inserta publicidad de lo que también recibe ingresos. «Y encima recibo el cariño de las seguidoras que es impresionante». De momento seguirá en este mundo pero, siempre, con una premisa importante:«Aunque ahora haya un boom de bloggers, no es fácil. Hay que trabajar duro y ser muy constante».