El PP avisa de que las primeras propuestas de Podemos traerán recortes y despidos

Excusas y pretextos. Los concejales de Podemos en Cádiz no han tardado ni cuatro días en aludir a la herencia recibida del PP para poner muy negra la situación y descargar con ello cualquier tipo de responsabilidad. Los populares gaditanos lamentan que tapen con este tipo de argumentos su propia incapacidad para gestionar y avisan de que algunas de las medidas que han planteado conllevan ajustes y despidos.

La primera batería de propuestas que ha presentado en sociedad el nuevo gobierno municipal de Cádiz son especialmente delicadas debido al impacto que pueden tener sobre el futuro de las arcas locales. Las primeras iniciativas plantean una revisión de la Zona Azul y el ajuste de algunas empresas públicas. El edil de Podemos en Cádiz, David Navarro, que se perfila como concejal de Hacienda, avanzó el pasado miércoles en una asamblea algunos datos de la deuda municipal y puso los primeros reparos para cumplir con algunos aspectos de su programa electoral.

Este periódico ha podido saber que si el nuevo alcalde de la ciudad, José María González, decide finalmente prescindir de los aparcamientos de la Zona Azul en la ciudad, por muy popular que parezca la medida, será la empresa publica Emasa la que pague el pato con una declaración de quiebra y el despido de unos 45 trabajadores.

Este aviso no es nuevo. Precisamente, la exconcejal socialista Marta Meléndez advirtió el pasado año que Emasa se asomaba al abismo al declarar pérdidas superiores a los 500.000 euros entre 2012 y 2013. La situación se logró mejorar levemente en 2014, pero la eliminación de las 776 plazas de aparcamiento regulado que tiene la ciudad que podría plantear Podemos provocaría una merma irreparable en esta empresa pública.

Las principales fuentes de ingreso del consistorio gaditano proceden del IBI, del impuesto de Circulación y de las tasas por ocupación de la vía pública. La ciudad, a diferencia de otras localidades, no tiene suelo para construir y favorecer con ello el cobro del impuesto de obras. Tampoco tiene un movimiento importante de compraventa de pisos capaz de generar ingresos por plusvalías. Los recursos de la ciudad son muy limitados y cuenta con muy poco margen para generar ingresos.

El Ayuntamiento trabaja en estos momentos con el presupuesto prorrogado de 2014 a la espera de aprobar aún el de 2015. Se da la circunstancia de que el PP dejó estas cuentas preparadas antes de las elecciones del pasado 24 mayo, sin embargo, no llegó a elevarlas a pleno para su aprobación. Esta situación dificulta cualquier operación y obliga al nuevo alcalde a cerrar cuanto antes un presupuesto para poder contar con liquidez. Para ello debe contar con el apoyo de la oposición para garantizar su aprobación. No olvidemos que el nuevo alcalde gobierna en minoría.

El escenario económico en el que se ha movido durante los últimos cinco años la exalcaldesa Teófila Martínez ha sido muy difícil debido a los efectos colaterales de la crisis, pero logró pagar las nóminas de los funcionarios mes a mes sin aplicar medidas traumáticas.

Por esta razón, el PP teme ahora que los mensajes de Podemos sean un primer aviso de lo que nos espera, aunque detrás de ellos se esconde su incapacidad para gestionar. El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Cádiz sostiene que Por Cádiz sí se Puede está «buscando pretextos para hacer recortes y no cumplir sus promesas».

Según los populares, las «quejas de manual de lo mal que nos han dejado los de antes el Ayuntamiento» a las que aludió el concejal David Navarro en el transcurso de una asamblea en referencia a la situación económica del Consistorio suponen «los primeros pretextos para llevar a cabo por parte de Podemos, lo que va a ser una clara gestión de recortes y despidos en los servicios públicos municipales que se prestan a los gaditanos».

La oposición considera «sorprendente que el próximo concejal delegado de Economía y Hacienda de la ciudad, David Navarro, diga que la deuda municipal es mayor de lo que pensaban, cuando la deuda y el estado económico del ayuntamiento son conocidos por todos y publicado trimestralmente en la web del Ministerio de Hacienda».

Entre la incapacidad y el engaño

Asimismo, se teme que «el ‘Por Cádiz sí se Puede’ se va a quedar» en «gobernar Cádiz nos queda grande» o «ya verás la que vamos a liar».El PP afirma que «estas primeras declaraciones del futuro concejal de Hacienda son los indicios de esta política que nos espera de incapacidad, engaño, recortes y despidos que van a ser las características del nuevo gobierno municipal».

El nuevo equipo de gobierno local ha solicitado una auditoría de las cuentas municipales para saber qué terreno pisan, pero desde las filas populares ya advierten de que los números son claros trasparentes, ya que las cuentas están auditadas por el Interventor, la Cámara de Cuentas y el Ministerio de Hacienda.

Los populares señalan que «los gaditanos podemos ir preparándonos para lo peor, porque los concejales de Podemos, una vez que acaben con las cuatro o cinco medidas populistas que tienen entre manos como lo de la reducción de la publicidad municipal, quitar la bandera de España y las fotos de José María González Kichi con el pueblo, tendrán que afrontar la verdadera gestión del Ayuntamiento.Esta situación llegará después del verano y será entonces cuando nos vamos a enterar en manos de quienes está el gobierno de Cádiz», reseñan los concejales del PP.

En este punto, insisten en que «es curioso que el alcalde ya empiece a no dar la cara a las asambleas ciudadanas justo a la primera semana de estar en el cargo, cuando todos los que allí van son de Podemos, y mande a su segundo a ponerse en evidencia con un discurso que nada tiene que ver con el sí se puede».

El PP señala que «una cosa era reventar plenos con megáfono en mano, decirles a los trabajadores de las contratas que los iban hacer funcionarios por la cara y prometer luz y agua gratis para todo el mundo y otra bien distinta  es gestionar una ciudad dentro de la ley, con las limitaciones económicas que la mayor crisis de nuestra historia ha provocado y teniendo que gobernar para todos, no solo para los que asisten a los círculos de Podemos».