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Estados Unidos consolida su presencia en Rota con la llegada del tercer destructor

El 'USS Porter', con 270 marinos, se suma al despliegue del Escudo Antimisiles y se abre la puerta a una posible ampliación del contingente

JAVIER RODRÍGUEZ
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El muelle cuatro de la Base Naval de Rota tuvo ayer un marcado acento norteamericano. La proa del destructor 'USS Porter' enfiló hacia la bocana del puerto a mediodía mientras la comitiva de recibimiento rendía honores desde tierra y numerosos familiares de la tripulación agitaban las banderas dando la bienvenida al nuevo contingente de marinos.

Este buque se suma al 'USS  Donald Cook', que llegó a Rota el 11 de febrero de 2014, y al 'USS Ross', que atracó en la Base gaditana en julio del año pasado. De esta forma, la OTAN empieza a encajar las piezas de su dispositivo naval contra la amenaza nuclear y terrorista que pueda venir de Oriente Próximo y Corea de Norte. A mediados del próximo septiembre llegará el cuarto y último destructor, el 'USS Carney’, que completará el despliegue del denominado Escudo Antimisiles en la cuenca atlántica occidental y en la zona mediterránea.

La relación entre España y Estados Unidos atraviesa su mejor momento y prueba de ello son las operaciones conjuntas que se llevan a cabo entre ambas armadas. El acto de bienvenida estuvo presidido por el embajador de Estados Unidos en España, James Costos, el Almirante y Comandante de la Sexta Flota, James G. Foggo, el Almirante Jefe de la Base Naval de Rota, Santiago González Gómez, y el Almirante de la Flota, Santiago Bolíbar. El 'USS Porter' viene con 270 marineros a bordo. El destructor se someterá en los próximos días a una varada técnica, que realizará el personal de Navantia, y zarpará para encontrarse con el ‘USS Ross’.

El embajador norteamericano destacó que la presencia de estos buques en una base española constituye una contribución conjunta en favor de la seguridad y son la columna vertebral de la defensa de la OTAN en Europa ante la proliferación de misiles balísticos. Este año se han realizado 19 ejercicios bilaterales, que han incluido desde formación en paracaidismo y submarinismo hasta desactivación de explosivos, pasando por el repostaje aéreo o maniobras de desembarco anfibio.

La ceremonia de bienvenida al buque contó con la presencia de representantes de los tres ejércitos españoles, así como de la cúpula militar estadounidense destacada en Rota, además de un nutrido grupo de autoridades civiles de la provincia.

La creación del Escudo Antimisiles se gestó en 2009 cuando el gobierno de Obama eligió a Rota como sede de las maniobras de la VI Flota para repeler la amenaza de países como Siria. La situación estratégica de la base gaditana, en el Estrecho, fue clave para desbancar de la carrera por el centro de operaciones a la base italiana de Sigonellla, en Sicilia, y a la griega de Souda Bay, en Creta.

Lo que la US Navy consigue basando la fuerza en Rota es evitar el largo tránsito del Atlántico, por lo que podrá tener permanentemente patrullando, al menos, dos destructores, uno en el Mediterráneo Occidental y otro en su parte Oriental, quedando otro en reserva o para reforzar la fuerza, pudiendo permanecer el cuarto navío inmovilizado en los astilleros o en el puerto, sujeto a tareas de mantenimiento.

La Cumbre de Lisboa de noviembre de 2010 fue el escenario donde se acordó desarrollar este sistema de protección. El 5 de octubre de 2011, el entonces presidente, Rodríguez Zapatero, compareció junto al secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, y el secretario de Defensa de Estados Unidos, Leon Panetta, para anunciar el despliegue en Rota de los cuatro barcos norteamericanos con el objetivo de contrarrestar la amenaza que suponía la política de armamento nuclear de Irán y Corea del Norte.

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El avance yihadista

Sin embargo, esta amenaza, lejos de frenarse, ha ido en aumento. La irrupción del Estado Islámico ha puesto en guardia a toda la defensa internacional. Este grupo terrorista insurgente tiene sus raíces en el yihadismo suní y ha autoproclamado el califato. Sus adeptos se han asentado en un amplio territorio de Irak y Siria controlando varias ciudades: Mosul, Faluya o Raqqa. Su escalada de violencia mantiene en alerta a la OTAN y es probable en un futuro la ampliación del despliegue naval con sede en Rota.

El embajador norteamericano en España, James Costus, confirmó que el cuarto destructor llegará a mediados del próximo septiembre y de, momento, «es lo que está comprometido». No se atrevió a aventurar nada más allá de esa fecha. Sin embargo, la ampliación de este dispositivo es algo que ya se rumorea en algunos círculos.

La llegada del tercer destructor consolida la presencia norteamericana en suelo español y, al mismo tiempo, reactiva la economía local. El gobierno de Rodríguez Zapatero dio en su momento todas las bendiciones a este despliegue naval y reconoció el fuerte impacto económico que supondría para la Bahía de Cádiz. La presencia de los cuatro barcos en Rota conlleva la permanencia en Cádiz de 1.300 miembros de la US Navy, desglosados en unos 1.265 marinos y 35 miembros del grupo de apoyo. Además, el contingente viene a la base roteña acompañado de sus familias: unas 2.100 personas, según los últimos datos. El impacto económico en la zona previsto por la propia Marina de Estados Unidos supera los 100 millones de dólares anuales.

Los primeros efectos de este despliegue naval se han traducido, por un lado, en un incremento de los alquileres en las urbanizaciones de Rota, Sanlúcar y Chipiona y, por otro, en el contrato que firmó Navantia en noviembre de 2013 por valor de 229 millones de dólares para el mantenimiento y reparación de los cuatro destructores durante los próximos siete años.

Precisamente ayer, la embajada norteamericana ofreció nuevos datos sobre el impacto económico y dijo que desde la confirmación del despliegue naval se han invertido en Rota 43 millones de euros en obras y servicios de acondicionamiento de las instalaciones. La presencia de las fuerzas estadounidenses en Rota y Morón han garantizado en 2014 un total de 3.500 contra

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