Susana Díaz empieza a distanciarse de Ciudadanos

Juan Marín la acusa de «crear un clima de inestabilidad innecesario»

La presidenta Susana Díaz, este jueves en el Parlamento junto a la consejera de Igualdad, María José Sánchez Rubio, y el Secretario general de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Máximo Díaz Cano RAÚL DOBLADO

El Gobierno andaluz ha empezado a distanciarse de sus socios de Ciudadanos, una estrategia que no tiene por qué significar que se vaya a producir un adelanto electoral inminente, si bien es cierto que levanta sospechas. Y la presidenta Susana Díaz lo sabe. Por eso ayer dijo una cosa y la contraria en el Parlamento andaluz. Susana Díaz dejó claro al portavoz de Ciudadanos, Juan Marín, que la Consejería de Hacienda está ya trabajando en la elaboración del proyecto de Presupuestos para 2019, «de eso no tenga ninguna duda».

Sin embargo, en su debate con quien es su «socio de investidura» —un término que repitió varias veces durante la sesión en el Parlamento para dejar claro que no tiene un pacto de Gobierno con la formación naranja— la presidenta se centró en lo que la separa de Ciudadanos, en lugar de destacar la estabilidad y el clima de entendimiento que, hasta ahora, ha reinado entre ambos partidos y que ha sido, además, uno de sus principales argumentos políticos.

«No comprendo que se preocupe por los Presupuestos y se desentienda de la financiación autonómica, que es la que garantiza que los presupuestos sean acordes con las necesidades de Andalucía», le dijo a Juan Marín .

El líder de Ciudadanos en Andalucía también cambió su habitual tono en sus debates cara a cara con Susana Díaz a la que acusó de generar «incertidumbre y un clima de inestabilidad innecesario» sobre el debate del adelanto electora l. Ciudadanos situaba así la responsabilidad de la estabilidad política en la comunidad autónoma en el tejado de la presidenta, presentándose ellos como la garantía de la misma, frente a «otros grupos» que llevan tres años de elecciones, «y nosotros tres años trabajando».

«Debería sentirse privilegiada porque además ha dispuesto de cien millones de euros para gestionar esta comunidad autónoma. Debería sentirse privilegiada frente a otras situaciones como Cataluña, o podemos hablar de Madrid o podemos hablar de Murcia», fueron las palabras de Juan Marín.

Cosa de todos

Pero Susana Díaz no estuvo dispuesta a hacer ninguna concesión a Ciudadanos y abundó en sus argumentos haciendo responsable de la situación política andaluza a todos los partidos del arco parlamentario andaluz, lo que no había sucedido hasta ahora. La presidenta dijo que la estabilidad «es cosa de todos» y anunció que el próximo 9 de mayo ha pedido al Parlamento la celebración de un debate general sobre la situación de la comunidad.

El objetivo de esta petición es doble. Por un lado demostrar que el Gobierno andaluz sigue trabajando y no pensando en las elecciones, y «fijar entre todos un horizontes de estabilidad y la hoja de ruta para 2018».

Las palabras de Susana Díaz fueron interpretadas rápidamente por el PP, que es la formación que está más convencida de que habrá adelanto electoral. «Está clarísimo, huele a elecciones» dijo un destacado dirigente popular a ABC .

Unas impresiones que también compartían desde Podemos e IU, si bien con más cautela. Ciudadanos, por su parte, evitaba comentar las palabras.

La formación naranja celebra esta mañana su Comité Autonómico —un órgano que se reúne mensualmente— donde se analizará la situación política andaluza y se planificará la estrategia para el futuro inmediato.

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