Una ley para la Juventud en Andalucía... 35 años después

El Consejo de Gobierno aprueba el anteproyecto que primará a los jóvenes en el acceso a las viviendas públicas

La consejera de Igualdad, María José Sánchez Rubio EFE/JULIO MUÑOZ

STELLA BENOT

La propia consejera de Igualdad, María José Sánchez Rubio, lo reconocía este miércoles ante los medios de comunicación. Las políticas de Juventud de la Junta han estado dispersas y no han contado con una norma que obligue a prestar atención a este grupo de población. Y eso a pesar de que el Estatuto de Autonomía establece derechos que amparan a este colectivo , que los jóvenes entre 15 y 34 años suponen 1,9 millones de andaluces, el 23 por ciento de la población total , y que la ley es una de las primeras promesas que hizo un Gobierno andaluz hace más de 35 años.

Tampoco ha sido fácil ahora porque el texto que ha aprobado el Consejo de Gobierno lleva tramitándose cuatro años (desde septiembre de 2014) con diversos períodos guardados en un cajón de la administración y varios informes en contra como el del Consejo Económico y Social.

Pero ayer el Consejo de Gobierno dio el visto bueno a un texto que incluye muchas novedades según explicó la consejera de Igualdad. La principal es que, por primera vez, una norma obliga a evaluar las políticas dirigidas a la Juventud. Según la información oficial del Gobierno andaluz, esta ley contará con 485 millones de euros para los primeros cuatro años.

«La ley entrará en vigor en esta Legislatura», dijo tajante Sánchez Rubio para tratar de despejar las sospechas de que se quede sólo en una declaración de buenas intenciones pero no llegue a aprobarse por un posible adelanto electoral.

Tanto la consejera de Igualdad como el portavoz del Gobierno andaluz, Juan Carlos Blanco, trataron ayer de salir al paso de las críticas que las asociaciones y colectivos juveniles , amén del Consejo Económico y Social han vertido contra este texto.

Medidas concretas

La Ley de Juventud es un compendio de las normas dispersas que regulan los órganos de participación de los jóvenes —el Consejo Andaluz de la Juventud y el Instituto Andaluz de la Juventud— y una serie de medidas genéricas para apoyar al colectivo. Pero el Gobierno andaluz puso mucho empeño en destacar que también incluye actuaciones concretas dirigidas a los jóvenes.

Entre las principales están las relativas a las políticas de vivienda. María José Sánchez Rubio explicó ayer que la norma primará a los jóvenes en el acceso a una vivienda pública por lo que la edad será un punto a favor de los demandantes en los registros públicos que gestionan los ayuntamientos. El objetivo es facilitar el acceso al alquiler de una vivienda o de préstamos para poder acceder a ellas.

El empleo es otro de los aspectos claves de esta ley según el Gobierno andaluz. A partir de su aprobación será obligatoria la puesta en marcha de un Plan de Empleo Joven con el objetivo de adecuar las capacitaciones de los jóvenes a las necesidades del mercado laboral, además de facilitar la transición desde el sistema educativo al mercado de trabajo.

Además, la juventud será considerada, por ley, como colectivo prioritario en la adopción de medidas específicas en materia de empleo cuando la tasa de desempleo juvenil en Andalucía supere a la media de Europa, como ocurre en la actualidad.

Críticas del PP

El presidente de Nuevas Generaciones de Andalucía, Kike Rodríguez, dijo ayer que el proyecto de ley es «claramente insuficiente, que cuenta con graves deficiencias», y que «consolidará el fracaso de las políticas de Susana Díaz para los jóvenes» .

Rodríguez ha censurado que los jóvenes andaluces «llevamos 35 años esperando una ley y la presidenta lo retoma a última hora, con prisas y a las puertas de un proceso electoral».

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