Bomberos voluntarios: «Estamos deseando llegar a Haití»

«Estamos deseando llegar, es importante que cuanto antes nos pongamos manos a la obra». José Martín, miembro de Bomberos Unidos Sin Fronteras (BUSH), revisa en la terminal de Barajas el material que el equipo que coordina va a trasladar a Haití para ayudar a los damnificados tras el paso del huracán Matthew.

«Se trata de una misión exploratoria», explica, que tiene fecha de comienzo pero no de finalización. Los cuatro especialistas españoles que componen la unidad (dos son de Huelva, uno de Córdoba y otro de Madrid) van a hacer una evaluación sobre el terreno en dos direcciones. De un lado, el lugar más idóneo en el que construir una planta potabilizadora dentro de la zona más castigada por el paso de Matthew y, en paralelo, establecer la ayuda médica que necesita la población afectada.

El equipo, en el que se integra la responsable de la Unidad Médica, la onubense Cindia Morales, trabajará sobre el terreno entre una semana y diez días según las primera estimaciones para poder hacer un diagnóstico de la situación, determinar dónde construir la potabilizadora, el hospital de campaña y los medicamentos más necesarios.

Lo único que saben es que llegarán en la madrugada de este miércoles a la República Dominicana donde harán noche para partir al día siguiente a Haití, punto en el que se sumará un quinto miembro procedente de la Red de Respuesta de la organización en Guatemala.

«El estancamiento de agua en la zona han subido el nivel de riesgo de cólera», señala el portavoz de la ONG en Huelva, Antonio Nogales, razón por la que su actuación es clave.

Los bomberos españoles se dirigirán de entrada a puntos devastados como son Los Cayos y Jeremy. Allí, sondearán los posibles puntos de abastecimiento de agua para los damnificados por el desastre. La unidad lleva material ligero, equipamiento para analizar el agua y poder establecer así un mapa de los posibles puntos de suministro, y herramientas para estabilizarlos, además de trasladar ayuda humanitaria y ropa donada por Aguas Huelva.

Una vez hecho el diagnóstico e identificado el punto para ubicar la planta, en función de la viabilidad y del acceso a la población necesitada, se levantar la planta, que se enviará a Haití desde España, Nicaragua o Guatemala.

El país caribeño, azotado por la pobreza y los desastres naturales, es conocido por los miembros de esta organización, que han estado presente en los últimos años, a raíz del terremoto de 2010. En aquella ocasión, fueron efectivos de la Unidad Canina y de Rescate los que se trasladaron a Haití para participar en la búsqueda de personas sepultadas con vida y lograron salvar varias vidas.

Tras el brutal seísmo, durante dos años y medio, los bomberos han estado participando en un proyecto de potabilización en el Hospital General de Puerto Príncipe, hasta que lo dieron por estabilizado. En este tiempo, han trabajado además en la reconstrucción de escuelas que fueron destrozadas por el terremoto.