El mundial de trasplantados llena Málaga de vida

Málaga es la capital del deporte solidario. La ciudad concentra hasta el próximo sábado a 2.214 deportistas, que lo son gracias a que alguien pensó en donar sus órganos. La vida les dio una segunda oportunidad, que han dedicado a concienciar mediante el deporte de la necesidad de conceder momentos de vida a otras personas. España, que es líder en trasplantes desde hace 24 años, acoge en esta ciudad del sur una fiesta de «dación de gracias», como se vio en la inauguración del pasado domingo cuando, tras las delegaciones de los diferentes países, el estadio se puso en pie para recibir a los familiares de los donantes. Personas de 52 países compiten desde el lunes por la mñana en 11 centros deportivos de la capital de la Costa del Sol en un ambiente de hermanamiento, donde lo que cuenta es disfrutar de la segunda oportunidad que les ha dado la vida.

Cuando ya han caído las primeras medallas, algunas de ellas para deportistas andaluces, la ciudad se llena de delegaciones que viven estos días como una fiesta en la que algunos intentan alcanzar la gloria deportiva y otros vivir una experiencia inolvidable. Golf, baloncesto, atletismo, petanca, tenis de mesa, tenis, squash, voleibol, ciclismo, bádminton, bolos, kayak, dardos, natación, pádel, triatlón virtual y carrera urbana son las 17 disciplinas en las que se puede competir. Cada deportista puede hacerlo en un máximo de cinco disciplinas.

No todo es deporte. La organización de los Juegos ha dispuesto una «Noche cultural» el miércoles 28 de junio en el Museo Automovilístico y en el Museo de San Petersburgo. El lunes y el jueves los más pequeños pueden disfrutar de un programa de animación infantil y juvenil. La «Marcha por la Donación» en esta jornada del martes espera reunir a 1.500 personas para seguir concienciando con la necesidad de seguir haciendo donaciones.

Al final de todo también habrá tiempo para la reivindicación del legado de un malagueño que murió pidiendo «donar vida». El próximo sábado, la ceremonia de clausura en el Estadio de Atletismo reivindicará la figura de Pablo Ráez. El marbellí deseó que se redujera la huella de carbono en estos mundiales, por esto el «mánager de equipo» de cada selección plantará un cepellón en el «bosque de las segundas oportunidades». Pablo Raéz, que consiguió multiplicar las donaciones de médula en un 1.200 por cien en Málaga, también estuvo presente la inauguración con el homenaje llamado «Being Strong».