Fallece Manuel Maeso, gran divulgador de la cocina tradicional malagueña

 «Si el tomate no sabe a tomate, no es tomate». Este axioma perdurará en la memoria de los familiares, amigos, discípulos y admiradores de Manuel Maeso, maestro gastronómico, más allá de su finitud de mortal. Hoy se ha despedido 'Manolo' para los cercanos que disfrutaban de su amistad y han sufrido el deterioro físico de su cuerpo tras una larga enfermedad. Queda su magisterio al frente de la asociación Carta Malacitana que como ninguna ha velado desde hace décadas porque el rico acervo culinario malagueño perdure y no se contagie de la insípida globalización 'gourmet'.

El pasado 29 de junio Manuel Maeso era agasajado por los miembros de esta Carta Malacitana para renombrarlo presidente y reconocerle toda una trayectoria en la divulgación de lo mejor de la gastronomía local.

En un acto celebrado en el Restaurante Frutos de Torremolinos, Manuel Maeso tuvo la oportunidad de que dar un último abrazo de despedida a amigos y correligionarios antes de este fatídico día. Muchos de los allí presentes glosaron su figura y destacaron su enorme legado en defensa de la cocina del terreno.

A Maeso se le reconoce una gran labor de difusión del recetario malagueño y su lucha por distinguir su especificidad dentro de lo que es conocida como cocina mediterránea, a la que siempre le encontraba singularidades en este pedazo de litoral con tantas herencias culturales. Conocida fue también su batalla por agrandar el glosario de platos típicos que fuera más allá del conocido 'pescaito frito' que nublaba por su comercialidad una baraja variada de brillantes recetas heredadas.

El mismo profesor de cocina será recordado por su defensa de los productos de cercanía, de la huerta y del mar, y de los de temporada, conjunto que defendió por ser más sanos, ayudar a una sostenibilidad y por acarrear una memoria sentimental más rica. Quiso llevar estos conocimientos y esta herencia a las escuelas de hostelería, hacer que permeabilizaran entre los jóvenes cocineros y comensales, y mejorar la imagen de marca de la cocina malagueña desde mucho antes que otras iniciativas institucionales. Su trabajo está ahí.

Desde las 18.30 horas de este miércoles, sus familiares y amigos lo estarán despidiendo en la sala 18 de Parcemasa en Málaga.