La Catedral de Málaga, un quebradero de cabeza para el Obispado y la Junta

Las goteras en la Catedral de la Encarnación son un quebradero cabeza para el Obispado de Málaga y para la Junta de Andalucía. Las filtraciones de agua requieren nuevas actuaciones en la cubierta , pero no pueden hacerse de forma unilateral. El templo malagueño es un edificio histórico protegido y tiene que ser la Consejería de Cultura la que dé el visto bueno a una solución que acabe con el problema. Por ello, el viernes ambas instituciones mantuvieron una reunión para tratar este asunto, así como la finalización de este emblema religioso con los proyectos recogidos en el Plan Director, presentado en diciembre de 2016. Un paraguas bajo el que se debate cómo seguir con los planteamientos del arquitecto Antonio Ramos, que tienen más de dos siglos de antigüedad.

«La Manquita» –como se le conoce popularmente– está inacabada. El hecho se puede apreciar en la ausencia de una de sus torres. Falta también la sacristía o una cubierta que proteja los techos. Es así desde el siglo XVIII y, aunque no se sabe cuánto tiempo puede seguir estando en esta situación, es evidente que el «cordial» acercamiento de la administración andaluza con la Diócesis de Málaga hace posible que el sueño incluso esté más cercano. El último encuentro ha servido, según el Obispado de Málaga, para «encontrar la solución de futuro más adecuada para el primer monumento de la ciudad y poner los medios necesarios ». «El objetivo es unificar criterios que permitan avanzar en el trabajo conjunto sobre el Plan Director de la Catedral», asegura la autoridad religiosa.

Pero de forma paralela, se debe buscar una solución a los problemas más urgentes, como es el caso de las goteras. Las filtraciones de agua que están deteriorando el templo y que deben ser atajadas. Cultura y Obispado se llaman a realizar unos trabajos que «aseguren la vida y el esplendor de la Catedral de Málaga». La Diócesis ya se ha puesto manos a la obra para solucionar los problemas. Las grietas de la cubierta y las filtraciones, que generan las goteras, son el principal problema de conservación. Se van a hacer unas catas para saber el origen de las filtraciones , que hacen que los cubos y los cierres parciales de algunas zonas del templo sean constantes cuando llueve sobre la capital.

La asociación «Málaga por su Catedral» defiende la construcción de un tejado a dos aguas , siguiendo los planteamientos originales. Pero la Junta pide estudiar la situación, de ahí que se planteen las catas sobre la cubierta. La construcción de un nuevo tejado sería la segunda vez que se lleva a cabo, ya que en el pasado ya se tuvo que acometer otro techo por el deterioro, que costó 1,6 millones de euros y que ha acabado con grietas y filtraciones.

En el último encuentro, la Junta se comprometió a reparar «los problemas más urgentes». El consejero de Cultura, Miguel Ángel Vázquez, aseguró tras la reunión del viernes que van a aportar «una respuesta a los problemas urgentes de la Catedral». «Es un bien patrimonial de primer nivel y queremos las mejores soluciones», apuntó el consejero, que determinó que la colaboración con el Obispado en la conservación del templo se hará en un doble plano. Por un lado, el arreglo de aquellas cuestiones de carácter «urgente» que están aquejando el monumento, como los problemas con las filtraciones. Por el otro lado, está «una visión más a largo plazo que se concretará en el Plan Director», donde se pide la finalización de un templo inconcluso con la construcción de la segunda torre, entre otros proyectos.