CURIOSIDADES

Unas monjas de Salamanca buscan en Córdoba el manuscrito fundacional de su monasterio

Las Religiosas Trinitarias de Villoruela se anuncian en la prensa local para recuperar el documento

El monasterio de Villoruela, en Salamanca WIKIPEDIA

S. L.

«Somos las Religiosas Trinitarias de Clausura del Monasterio de Villoruela , en Salamanca». Así empieza el anuncio publicado estos días en la prensa local, con el que estas monjas quieren movilizar a la ciudadanía por si tuvieran alguna pista sobre el paradero del manuscrito de 1945 que es la piedra fundacional de su institución. «Creemos que el original puede estar en Córdoba, ya que allí fue visto por última vez», explican.

Según narran las religiosas, el ejemplar fue enviado a Córdoba para ser reproducido mediante fascímil . «Creemos que puede estar incluso reproducido el trabajo encargado», afirman, y se ofrecen a correr con la factura pendiente. «Si este anuncio la providencia lo pone en manos de su poseedor», continúan, « rogamos encarecidamente que se ponga en contacto con este monasterio ». Para terminar dejan un teléfono de contacto: 923 356 104.

«Un sacerdote trinitario manejó los documentos, pero los perdió», afirma Sor Milagros

Este periódico se ha puesto en contacto con la comunidad religiosa castellana y una de sus componentes, Sor Milagros, ha asegurado que un sacerdote trinitario fallecido en 2012 tuvo en sus manos en el documento que buscan, «pero lo perdió». «Él era el encargado de la organización de los actos del quinientos aniversario de nuestra comunidad y manejó esos papeles que ahora buscamos», relata Sor Milagros. Y añade: «Tenemos mucho interés en recuperarlos porque son los más antiguos de nuestra comunidad y para nosotros tienen mucho valor».

La página web de la Federación de Monjas Trinitarias cuenta que el Monasterio de Santa María la Alta de Villoruela fue fundado en 1510 por la noble salmantina Catalina de Anaya. En la actualidad, la comunidad continúa con su vida monástica trinitaria, entregando su vida a Dios Trinidad, en el trabajo, el silencio y la oración.

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