El escultor cordobés, dibujado junto a una de sus criaturas
El escultor cordobés, dibujado junto a una de sus criaturas - ABC
CINE

Noé Serrano, el vecino de Santa Cruz que moldeó la cabeza del «Monstruo viene a verme»

Una muestra sobre la obra del colaborador del cinesta Juan Antonio Bayona arranca el 31 de marzo

CÓRDOBA Actualizado: Guardar
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«Has llamado en el momento justo: vente para Barcelona, a trabajar con nosotros». El escultor cordobés Noé Serrano, en concreto de la barriada periférica de Santa Cruz, levantó el teléfono para ofrecerse a la empresa de efectos especiales DDT justo cuando su ofrecimiento no iba a caer en saco roto. Los dueños de la compañía, que son David Martín y Montse Ribé, le dijeron que cogiera el primer tren que tuviera a mano para llegar a la capital catalana y ponerse a sus órdenes. «Estamos trabajando en algo importante para lo que eres necesario», le dijeron.

«Ha sido una experiencia trabajar cuatro meses con un equipo de Oscar»
Noé Serrano

Y Noé hizo las maletas y allí se plantó. «Una vez allí me incorporé enseguida al equipo que estaba componiendo la maqueta de la película 'Un monstuo viene a verme', de Juan Antonio Bayona», explica el artista.

El filme arrasó en la última edición de los premios Goya, celebrada el pasado febrero, ya que ganó nueve de las doce estatuillas a las que optaba, entre ellas la de Mejor Dirección y Mejores Efectos Especiales.

«En la oficina de DDT conocían mis obras a través de las redes sociales y porque yo expongo en galerías de Barcelona», comenta el Serrano, que se integró en el equipo que moldeó a la criatura de la película de Bayona. «Con el director coincidí en alguna ocasión: ha sido toda una experiencia colaborar con él y, durante cuatro intensos meses, con el mismo equipo que ganó un Oscar por 'El laberinto del fauno'»

Cartel de la película
Cartel de la película - ABC

Licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, Noé se sintió fascinado desde su etapa de estudiante por la anatomía, tanto humana como animal y comienzó su estudio de forma casi compulsiva. Tal y como resalta su biografía oficial, «su pasión por el cine de ciencia ficción le lleva primero al mundo de los efectos especiales; tras algunos encargos comprueba que el ritmo de trabajo y los plazos de entrega tan apretados impiden el cuidado por el detalle que él necesita, de modo que su pasión por su obra le deriva al mundo del arte». «Fue una decisión difícil, sobretodo teniendo en cuenta su lugar de residencia, un pueblo en las afueras de Córdoba, aislado del mercado artístico y casi de la sociedad», agrega.

Pero su vocación seguía ahí, y sus estudios también. «El resultado es una obra inquietante y perturbadora que ahonda en los sentimientos más viscerales del ser humano. Todo cristaliza en un mundo de bestiarios y seres fantásticos, donde la anatomía se pone al servicio del arte, la ironía y la crítica».

Desde el 31 de marzo y hasta el 2 de abril el barrio periférico en el que nació Serrano acoge la muestra «Un Monstruo Viene a verme. Noé Serrano en DDT Efectos Especiales» y que se inscribe en el marco del evento lúdico y cultural denominado «Santa Cruz Crea 2017».

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