TRIBUNALES

Los retrasos de la Justicia en Córdoba: una de cada tres vistas se aplaza

Las salas de lo Social y lo Contencioso acumulan la mayor parte de los juicios pospuestos

Ciudad de la Justicia de Córdoba VALERIO MERINO

P. GARCÍA-BAQUERO

En muchas ocasiones, un agente judicial va hacia la puerta de la sala de vistas, llama a todos los citados (testigos, peritos, policías nacionales, agentes de la Benemérita, forenses, acusados y víctimas) y les dice: « Señores, el juicio se ha suspendido , se pueden marchar; ya les llamaremos para una nueva citación». Esta escena se repitió en tres de cada diez juicios durante 2017 , según recoge la memoria del Tribunal Superior de Justicia del TSJA, lo que incide en la ralentización de la Justicia.

A veces, la suspensión es inevitable por enfermedad justificada de un acusado o letrado, incluso por un accidente de última hora. En otras, pese a la voluntad de funcionarios y tramitadores, letrados de la administración de Justicia, jueces y fiscales -que llaman y citan incluso telefónicamente a los citados-, podría haberse hecho algo más , pues algunos problemas de última hora se pueden evitar. Es el caso, por ejemplo, de un sistema de videoconferencia de una comunidad autónoma incompatible con otra. Lo cuentan fuentes del Juzgado de lo Penal número 5 de Córdoba, donde los aplazamientos en este primer trimestre sólo han supuesto 6 de los 101 juicios señalados.

El daño no es solo para los implicados sino que testigos, por ejemplo, han faltado a sus trabajos o han perdido horas viajando desde cualquier lugar de España o incluso desde el extranjero. Si quien falta es un testigo esencial, un abogado o un acusado (y la pena que se le pide supera los dos años de prisión), el juicio tiene que suspenderse. Esto ocurre en torno a uno de cada tres señalamientos de media en todas las jurisdicciones en Córdoba.

El juez decano de Córdoba, Miguel Ángel Pareja , reconoce que «el que se celebren todos los juicios señalados es lo ideal, pero también es cierto que nadie está libre de tener un problema para asistir , enfermedad que le impida comparecer, imposibilidad o accidente. Si es esencial para el juicio y no ha podido venir, hay que señalarlo para otro día, es habitual y ordinario». Sin embargo, el magistrado Pareja reconoce que en ese momento la Justicia empieza a sufrir un retraso, aunque sea justificado si, por ejemplo, el acusado está ingresado en un hospital y no puede acudir.

Sanciones económicas

En el caso de que se trate de un un ciudadano y esté justificada su ausencia no hay ningún problema, pero si no existen motivos también se pueden imponer sanciones pecuniarias . Incluso, si se trata de un testigo esencial para el caso se puede ordenar a las Fuerzas de Seguridad del Estado que lo trasladen al juicio en el día y hora señalados. En los casos más extremos, un testigo esencial ausente puede ser procesado por un delito de obstrucción a la Justicia.

Por jurisdicciones, en lo Civil durante 2017 se suspendieron 3.182 juicios de los 8.850 previstos (26%); en Penal , de los 6.724 juicios se suspendieron 1.723 (20%), mientras que en lo Contencioso , de los 2.038 juicios se suspendieron 775, lo que representa un 28 por ciento. La peor cara la muestra la jurisdicción de lo Social , con un 30 por ciento de suspensiones de las casi 20.000 vistas celebradas el pasado año.

Colegio de Abogados

Desde el Colegio de Abogados de Córdoba, su decano, José Luis Garrido , cree que la suspensión de una vista «es como una incidencia más del procedimiento». En este sentido, Garrido aseguró que «suspender una vista un día no creo que provoque más daño que un problema endémico en los juzgados como Primera Instancia y Social, que señalan a más de un año y soportan una carga de trabajo muy fuerte por falta de medios».

« La suspensión de las vistas no es la principal causa del retraso de los juzgados . Hay que intentar que estas suspensiones no se produzcan, pero se dan cuando es estrictamente necesario y eso da garantías», defiende Garrido. «Si hay peritos o testigos esenciales, o partes que no han ido al juicio, hasta que no estén todas las partes es preferible que no se celebre a realizarlo sin garantías», reitera el decano de los abogados. Garrido achaca el retraso de la Justicia no a la citación en los procedimientos sino a los retrasos en la tramitación , independientemente de que «en esas suspensiones tengamos que afinar un poco más, evitando así una citación inútil».

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