Municipal

El momento más crítico del mandato municipal en el Ayuntamiento de Córdoba

La alcaldesa vuela los puentes al pedir a Ganemos que le ponga una moción de censura

Firma del acuerdo de gobierno Valerio Merino

RAFAEL RUIZ

En un alarde de diplomacia, la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio , voló los últimos puentes que quedaban en pie (que tampoco eran tantos) al pedirle a Ganemos y al PP que le pongan una moción de censura. Que basta de entorpecer su labor de gobierno, que es lo que se supone que hace la oposición en una democracia, y que colaboren. La respuesta ha sido que a nadie se le firmó nunca un cheque en blanco. Queda inaugurado el momento más crítico del mandato .

El asunto es como sigue. Dentro del gobierno municipal, PSOE e IU tienen cada vez más diferencias sobre cada vez más asuntos. Desde la gestión interna de la casa hasta asuntos de calado urbanístico o empresarial. Y el tercero en liza se siente profundamente ninguneado tras la multitud de papeles firmados que nunca se han llevado a la práctica. La parte alícuota del pago de la novatada de creer que se puede influir en un gobierno sin estar dentro de él.

Las ordenanzas, y antes Cosmos (y antes de antes la dimisión de Rafael del Castillo , más cerca a Ganemos que a sus propios compañeros de IU), han puesto en solfa la estabilidad interna del equipo de gobierno. El gran beneficiario de todo este lío es el Partido Popular, que ha visto como el tripartito se erosionaba sin tener que mover un dedo. Por sus propias diferencias. En un momento en el que ya nadie se corta en expresar las profundas desavenencias. Todos contra todos.

El PP no va a presentar una moción de censura (no tiene la mayoría absoluta de los votos que se exigen para plantearla) e Isabel Ambrosio no se va a someter a la cuestión de confianza que fue introducida en la legislación allá por 2011. En este caso, porque existen muchas posibilidades de que pierda el cargo a pesar de que se encuentra justo en la casuística que estableció la ley para estos casos: perder la votación de los presupuestos, las ordenanzas, el reglamento orgánico o el Plan General de Ordenación Urbana.

Acierta Ambrosio en una cuestión. La perspectiva electoral lo está cambiando todo. El PSOE está centrándose a marchas forzadas porque su público no es del tono de principio de mandato, cuando los pollos con las cofradías. IU tiene que poner tierra de por medio de los socialistas porque no son la gente (marca registrada). Ganemos no sabe todavía si seguirá o si tendrá que ceder el testigo a una marca de confluencia entre Podemos e Izquierda Unida. Tanto sitio en la izquierda no hay.

El riesgo cierto es el del bloqueo político. En semanas debería iniciarse el trabajo presupuestario que parece condenado a la prórroga. Urbanismo trabaja en estos momentos en algunos asuntos donde el enconamiento es tal que no da la impresión de que puedan salir adelante pacíficamente. En ese caso, el gobierno seguirá siendo gobierno pero no gobernará.

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