Bretón, intervenido en el Hospital de Ciudad Real tras autolesionarse en su celda con dos cortes en el cuello

José Bretón, condenado a 40 años de prisión por asesinar a sus hijos Ruth y José en 2011, ha sido intervenido este jueves en el Hospital General de Ciudad Real tras autolesionarse en el cuello con una cuchilla de afeitar la pasada noche, y se encuentra bien, estable y fuera de peligro.

Bretónse lesionó ayer con dos cortes en el cuello en su celda en la prisión de Herrera de la Mancha (Ciudad Real), han informado a Efe fuentes penitenciarias.

El suceso ocurrió anoche en torno a las 22.00 horas en su celda que comparte con otro preso, ya que Bretón está ingresado en régimen de acompañamiento terapéutico, aunque el centro no le aplica en estos momentos el Protocolo de Prevención de Suicidios (PPS), y esta mañana ha sido intervenido en el hospital de la capital manchega.

Fue su compañero el que avisó inmediatamente a los funcionarios de que Bretón se había dado dos cortes en el cuello con algún objeto que las fuentes no han podido precisar.

Alertado el 112, una UVI atendió a Bretón en el centro penitenciario y lo trasladaron al hospital de Ciudad Real, donde ha sido operado. El recluso, tras salir del quirófano, ha sido trasladado a la unidad de reanimación del centro hospitalario, según han informado a Efe fuentes sanitarias, y ya está estable.

Reacción de la familia Ortiz

Por otra parte, la familia de Ruth Ortiz, su exmujer, considera que lo único que persigue es «llamar la atención». «Sabemos su modus operandi. Sabemos que ahora toca llamar la atención, porque siempre suele hacerlo en octubre y en Navidad, y ahora tocaba», han indicado a Europa Press desde la familia de Ruth Ortiz.

José Bretón fue condenado en el verano de 2013 por la Audiencia de Córdoba a 40 años de prisión por asesinar y quemar a sus hijos, Ruth de seis años y José de dos, en 2011. Posteriormente la Audiencia de Córdoba fijó en 25 años el límite de cumplimiento de condena. Desde mayo cumple su pena en la cárcel de Herrera de la Mancha después de pasar por los centros de Jaén II, Villena (Alicante) y Córdoba.