Intervención avisa de que es «imposible» hacer a tiempo la obra más cara del Plan Turístico de Córdoba

Cada vez es más evidente el lento desarrollo del Plan Turístico de Córdoba, que cuenta con financiación de la Junta, por parte de la Concejalía de Turismo (IU). Hasta el punto de que en un documento oficial, del 10 de marzo, de esta Área municipal se indica que esta Delegación trabaja para ampliar los plazos de este programa de inversiones.

El 20 de octubre es la fecha tope para concluir las actuaciones del Plan Turístico que, según el citado documento, está desarrollado al 51,6%. La partida total del programa es de 5 millones: 60% de fondos regionales y 40% municipales.

Es llamativo que esta Concejalía asegure en el citado documento que, «en previsión de que algunas obras puedan no ejecutarse en plazo», está iniciando el papeleo para otra prórroga.

El consejero de Turismo, Francisco Javier Fernández, ha advertido públicamente que no habrá otra moratoria. La primera se concedió después de que el bipartito PSOE-IU alegara el bajo nivel de ejecución con el que heredó este paquete de proyectos de manos del PP.

En el documento, la Delegación municipal de Turismo indica otra vía de actuación para intentar no perder fondos de la Junta. Trabaja también «en la solicitud de la ampliación del plazo de ejecución y de justificación» de las actuaciones dentro de la vigencia de este programa, que expira el 5 de marzo de 2018. La prórroga dejó el 20 de octubre como fecha tope para ejecutar las obras; el 5 de diciembre como día máximo para justificar los proyectos y el citado 5 de marzo de 2018 como último día de vigencia del acuerdo. Con ese horizonte temporal, prosiguen desde la Concejalía, «habría margen suficiente para cumplir los compromisos».

Según lo señalado hace unos días por el edil de Turismo, Pedro García, todo apunta a que esta será la vía por la que opte el Consistorio para tratar de no perder financiación regional.

El informe de la Concejalía responde a otro de la Intervención municipal, de 9 de marzo, en el que fiscalizó de «disconformidad» el contrato que debe abrirse para acometer la principal inversión pendiente del Plan Turístico: rehabilitar el Convento Regina, para convertirlo en un contenedor cultural.

La actuación costará 712.283 euros. A eso se unen unos 150.000 abonados en intervenciones previas. El ente de fiscalización afirma que es «materialmente imposible» finalizar los trabajos antes del 20 de octubre. La duración de las obras es de ocho meses -reducibles a seis si la empresa ganadora lo acepta-, pero aún la obra no se ha sacado a concurso.

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