CONTRATOS

Guadalquivir Futuro desoye al juzgado de Córdoba y no devuelve las mordidas a sus trabajadores

Los empleados presentan una demanda de ejecución para investir si la organizacion es solvente

Un grupo de personas se manifiestan a favor de los responsables de Guadalquivir Futuro VALERIO MERINO

RAFAEL RUIZ

Ni con una sentencia de un juzgado de lo social. Los trabajadores que tuvieron que pagar mordidas a entidades ligadas al Partido Socialista de la zona Sur de Córdoba no han visto satisfecta todavía su reclamación de que se le devuelva el dinero que pagaron como supuestas donaciones voluntarias pero que eran exigencias de entregar una parte del salario que pagaba la Junta de Andalucía para la contratación de personas paradas. Pasado el tiempo de pago voluntario de las cantidades reconocidas a la Justicia, la asociación Jóvenes hacia el Futuro , una de las que conforman el grupo de asociaciones con lazos en la estructura socialista, no ha devuelto ni un solo euro tal y como viene reflejado en el fallo judicial correspondiente.

A principios de abril, el juzgado de lo social número tres de Córdoba condenó a la organización a devolver a tres trabajadores la integridad del dinero que había recaudado durante los seis meses que trabajaron para la organización con dinero autonómico. En total, la asociación que preside el exsecretario general de las Juventudes Socialistas en Córdoba capital Cristian Menacho tenía que satisfacer el pago de unos 5.700 euros a tres personas.

Posibles embargos

Este tipo de procedimientos da un plazo prudencial a las entidades condenadas con el propósito de que ordenen el pago de las cantidades. Eso nunca se hizo. Ello ha obligado a los tres trabajadores afectados a presentar una demanda ejecutiva con el objetivo de que el juzgado mire a ver qué bienes tiene a su nombre Jóvenes hacia el Futuro con el objetivo de realizar los embargos pertinentes. Según las fuentes consultadas, la organización no ha declarado ningún procedimiento de insolvencia .

Los exempleados afectados por las mordidas podrían ser derivados al Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), un organismo autónomo del Gobierno que tiene como misión hacerse cargo de la protección de las personas que se encuentran en situaciones similares. Ocurriría así que el caso de las mordidas le costaría al erario por partida doble.

A los trabajadores se les pueden reconocer sus derechos, pero la organización puede ser insolventes

Las posibilidades que tienen los empleados de que se les reconozcan sus derechos en una sentencia son muchas. Sin embargo, la probabilidad de que estas entidades paguen lo que se llevaron del salario de estos trabajadores es muy baja. Todos los interlocutores dan por hecho que el juzgado puede acabar decretando la insolvencia de las organizaciones no gubernamentales que recibieron más dinero del PSOE hasta que empezaron a aparecer las denuncias de la retención de salarios.

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